El calendario oficial de vacunación infantil incluirá el próximo año cambios entre los que destaca la inclusión de la vacuna frente al neumococo, una bacteria que puede provocar graves infecciones como la sepsis, la neumonía o la meningitis; así como enfermedades menos graves pero más frecuentes como la otitis y la sinusitis. Los más vulnerables son los niños menores de dos años y las personas mayores de 65 años. En la actualidad existen dos vacunas conjugadas (para niños) en el mercado (prevenar 13, que protege de 13 serotipos ; y sinflorix, que inmuniza de 10 serotipos).

La vacunación de la población infantil recae, de momento, en las familias, que deciden proteger a sus hijos de esta bacteria, y adquieren la vacuna en farmacias, con un coste que gira en torno a 230 euros. Tras una decisión del consejo interterritorial, donde están representadas las consejerías de salud de todas las comunidades autónomas, el pasado mes de enero se acordó incluir esta vacuna en el calendario oficial, de manera que se garantice la máxima cobertura de la población a cargo del erario público. Algunas comunidades autónomas como Valencia o Canarias ya vacunan a los lactantes desde principios de año; y otras como Andalucía y Cataluña comenzarán esta vacunación a lo largo del próximo año.

Sociedades científicas como la Sociedad Española de Vacunología y la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria aplauden la medida por la que han presionado a las autoridades sanitarias en los últimos años. "Ante el neumococo existen dos tipos de vacunas, las polisacáridas, cuya eficacia aumenta con la edad y es la que se pone a las personas mayores; y las conjugadas (portan una proteina trasportadora), que son las que se administran a los niños", explica el doctor Amós García Rojas, presidente de la Sociedad Española de Vacunología, quien recuerda que la inclusión de esta vacuna en el calendario oficial es una reivindicación de la sociedad científica para prevenir una enfermedad que puede tener unas manifestaciones muy graves. "Desde hace años se administra de manera privada pero esto conlleva que sólo accedan a la inmunización aquéllos niños cuyos padres pueden costearla", asevera. Se estima que la vacunación privada, a cargo de las familias,ha logrado una cobertura del 50% de la población infantil, cifra que aumentará hasta el 95% cuando se incluya en el calendario oficial. En 2014 la cobertura de las vacunas que administra el Servicio Andaluz de Salud alcanzó al 96,4% de la población infantil.

"El neumococo tiene más de 90 serotipos, pero sólo 20 de ellos son patógenos y causan el 80% de los casos de la enfermedad invasiva, que se produce cuando el germen entra en la sangre (neumonía, sepsis o meningitis), los casos más graves; y en torno a diez de estos serotipos afectan a niños", precisa la pediatra Marisa García Gestoso, directora del Plan de Vacunas en la Junta de Andalucía. Las dos vacunas conjugadas que actualmente existen en el mercado farmacéutico protegen frente al 80% de los serotipos propios de nuestro entorno. Los serotipos del neumococo suelen variar según el territorio debido, entre otros factores, a la capacidad de resistencia a los antibióticos. "Parece que en función de los antibióticos que se administren en cada país, circulan unos serotipos u otros", explica la especialista, quien incide en que las bacterias son inteligentes y tienen capacidad para sobrevivir y crear resistencias. De ahí, la enorme importancia de un uso racional de los antibióticos.

En la actualidad la mejor estrategia para combatir el neumococo es la vacunación. Además de la inclusión en el calendario oficial infantil, desde 2001 el SAS vacuna a la población de riesgo, formada por aquellas personas con el sistema inmunológico deprimido. En la campaña de la vacunación de la gripe, las personas mayores de 65 años también pueden recibir la vacuna frente al neumococo. "Junto a los niños, las personas mayores son las más vulnerables a una infección", añade la doctora García Gestoso.

Como el resto de las vacunas, la protección ante el neumococo estimula una respuesta en el organismo para que genere anticuerpos ante la enfermedad. Además de la protección individual, para la salud pública resulta muy interesante la protección rebaño, que es aquella que se genera cuando gran parte de la población está vacunada.

Cuando se incluya el próximo año en el calendario, el esquema de la vacunación incluirá dos dosis en el primer año (a los dos meses de vida y a los cuatro) y otra de refuerzo, en el segundo año. El efecto rebaño reforzará la inmunidad ante esta infección.

Otro de los cambios destacables en el calendario oficial de vacunación afectará a la vacuna de la varicela que, hasta ahora, se administraba a los doce años y que se adelantará la primera dosis a los 12 meses. Esta primera dosis se reforzará con otra en torno a los tres años. Este cambio se introducirá en 2016 y terminará con una polémica que surgió hace poco más de dos años cuando el Ministerio de Salud retrasó, de manera unilateral, esta vacuna, y la retiró de las farmacias. "Las sociedades científicas hemos reivindicado desde entonces la recuperación de esta vacuna para la primera infancia", explica el doctor Fernando García-Sala Viguer, responsable del Equipo de Vacunas en la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria. El tercer cambio del calendario para 2016 afecta a la vacuna del papiloma humano, que se adelantará de los 14 a los 12 años.