éstas van a ser unas Navidades muy especiales. La ciudad va a estrenar alcalde. Ya ha estrenado el árbol de Navidad más grande de España, con unos efectos de luces asombrosos, en la Plaza de San Francisco. A la vuelta del año empezará la cuenta atrás del quinto centenario del regreso de la nao Victoria al puerto de Sevilla después de completar la primera circunnavegación.

Con las necesarias cautelas, han vuelto las colas a los belenes, se prodigan en las administraciones de Lotería, especialmente en Sagasta y El Gato Negro de la Avenida, otro tránsito mágico del 21 al 22, el día del sorteo, el segundo que se celebrará en pandemia.

Hermosa redundancia de molinos de Alcalá en el entorno de Baños de la Reina Mora

Todo el mundo cristiano evoca el camino de Judea a Galilea que tendrá como colofón la Cabalgata de los Reyes Magos, esa idea maravillosa de José María Izquierdo, el único nombre propio de Ocnos de Cernuda, un promotor de la ilusión,vecino de la calle Castellar, de quien en 1922 se conmemora el centenario de su temprana muerte.

La casualidad y la curiosidad combinadas nos han permitido apreciar un curioso fenómeno: comprobar que la forma de celebrar la Navidad en algunas localidades de la provincia ha llegado hasta Sevilla en notables embajadas de soldados, pastores y monarcas. Por la calle Baños, si uno entra en el Nacimiento que la hermandad de la Vera-Cruz ha instalado en los Baños de la Reina Mora se llevará una agradable sorpresa. A continuación de una maqueta en la que aparecen la ciudad amurallada y sus puertas más importantes, la mayoría derribadas en tiempo del alcalde García de Vinuesa, hay un belén muy singular con una guía didáctica para el visitante.

Reproduce algunos de los monumentos de Alcalá de Guadaíra, ciudad de procedencia de las piezas, una maravilla de diseño cedido por Manuel Martínez Prado y con dirección de Luis León Pérez. Un plano indica los doce hitos del escenario, que incluye cinco molinos, algunos ya existentes en la Edad Media: el de Realaje, el de la Tapada, El Algarrobo, el de Benarosa y el de San Juan. Una infraestructura molinera, molinos que agigantan la historia de Alcalá, que explica su topónimo popular de Alcalá de los Panaderos. El belén lo preside el Castillo construido bajo dominación musulmana, junto a los pinares de Oromana, a los que se llevaba a pasear Miguel Muñoz a sus futbolistas cuando concentraba allí a la selección española. Tiempos del número doce.

De la carretera de Málaga, en la que se encuentra la populosa e industrial Alcalá de Guadaíra, patria de paisajistas y de buenos cantaores, a la carretera de Cádiz, ya sin peaje. A modo de castillo, la fortaleza principal de Las Cabezas de San Juan es su iglesia. Esta población está unida al himno de Riego, general asturiano que levantó a sus tropas contra Isabel II el 1 de enero de 1820.

En esa ciudad hace más de treinta años surgió un coro vinculado a la cofradía Nuestro Padre Jesús Nazareno. En 2016 ganaron seis premios, editaron su primer disco y recientemente han vuelto a ganar en un certamen de villancicos celebrado en Algeciras.

El coro fue la grata sorpresa que se llevó el público asistente en el Teatro Cajasol a la Exaltación de la Navidad que todos los años organiza la cadena Cope. En esta ocasión le correspondió al historiador del Arte Fernando Gabardón de la Banda, que contó un titulado Relato de Navidad que fue un tributo a Charles Dickens y a las vivencias infantiles del narrador sevillano. De la mano de un ángel de la guarda, recorrió el camino de Belén con obras de Martínez Montañés, Murillo, La Roldana, Valdés Leal, Roelas y Luis de Vargas.

Judea está de fiesta, cantaban los integrantes de este Coro cabecense, paisanos de Marchena, campeón del mundo en Sudáfrica con la selección de Vicente del Bosque. Las letras de sus villancicos son de Rubén G. Quiñones, Francisco Javier García Oca y María de los Remedios Vargas, entre otros autores. El coro lo integran varias generaciones, con lo que la continuidad de la agrupación está garantizada.

Un belén de Alcalá de Guadaíra en la calle Baños, molinos de agua en los históricos baños árabes, hermosa redundancia, y villancicos de Las Cabezas de San Juan, mirador de la Arcadia de Jacobo Cortines, en el Teatro Cajasol. El belén evocado por Gabardón en su relato tenía como elementos arquitectónicos la Giralda, la torre del Oro o la antigua mezquita del Salvador. A Dickens, que viajó a Sevilla hasta el Cartuja Center en el Cuento de Navidad interpretado por Mariano Peña, le hubiera fascinado este relato a partir de una añeja fotografía en blanco y negro.

De Alcalá de Guadaíra a Las Cabezas de San Juan. El pan de molino y el pan de pueblo. En el Nacimiento de la hermandad de la Vera-Cruz están también representadas la estación de Bombeo de Alcalá, construida en 1885, la ermita de San Roque situada en el cerro del Calvario, la ermita del Águila, nombre de la patrona de la ciudad, la plaza del Perejil, la cuesta de Santa María por la que se accede al cerro del Castillo y la Iglesia Mayor de Santiago, corazón de la Madrugá alcalareña.