El candidato pidió el viernes flexibilidad en la aplicación del cierre del centro al tráfico. Y el alcalde insistió ayer en que la Policía Local será especialmente flexible. Monteseirín responde así con celeridad al ruego de Espadas. Petición pública, contestación pública. Si la relación entre la petición y la respuesta es de causa y efecto, o si obedece a una muy gestionada coordinación entre los equipos socialistas de gobierno y campaña, es materia de análisis que el tiempo se encargará de aclarar en breve. Lo que está fuera de duda es que las políticas de tráfico suelen ser traumáticas -como admitió ayer el propio alcalde- por lo que el PSOE tiene que hilar especialmente fino para no escocer a los ciudadanos con elblindajede la zona monumental, un plan polémico que se aprobará en el Pleno del viernes y que entrará en vigor de inmediato gracias a un trámite de urgencia.

El alcalde sumó a la promesa de flexibilidad la de "sentido común". Explicó que la Policía Local no perseguirá a los conductores: "No habrá un afán recaudatorio. Si un conductor se equivoca por un mero error, desconocimiento o distracción seremos flexibles. Ahora bien, si es reincidente, que se tiente la ropa. Este plan será muy beneficioso. Lo explicaremos al ciudadano las veces que haya explicarlo. Y una vez que entre en vigor -añadió- el ciudadano verá sus efectos sin necesidad de intermediarios que lo interpreten". Citó expresamente a Espadas como el "próximo alcalde socialista" al referirse a la continuidad de las políticas en favor del peatón que ya ha anunciado el candidato.

Monteseirín destacó la peatonalización de la Avenida, que acabó con el tránsito de 11 líneas de autobuses junto a la Catedral: "La movilidad no se vio afectada. Hemos ganado en calidad de vida ¿Y qué precio tiene volver a ver al os niños jugar en la Plaza Nueva? Lo que no podemos soportar son cien mil vehículos al día en el casco histórico".

El Plan de Ordenación Viaria del Casco Antiguo y Protección de la Zona Monumental está destinado a restringir el tráfico privado en el casco histórico incluso mediante un régimen sancionador que limita a 45 minutos el tránsito por el centro a los conductores no residentes o que no se ajusten a las excepciones contempladas en la normativa. Este plan divide el casco histórico en cuatro zonas -Noreste, Noroeste, Sureste y Suroeste- con varias entradas y salidas cada una, pero todas ellas controladas por cámaras de visión artificial que identificarán las matrículas de los vehículos. Y es que su finalidad es restringir, mediante un régimen sancionador incluso, los accesos, salidas y circulación del tráfico privado en el casco histórico para priorizar el transporte público y la movilidad sostenible. Monteseirín inauguró ayer el punto de información instalado por el Ayuntamiento en la Plaza Nueva para difundir el contenido de este plan que ya ha llegado a más de 22.000 hogares gracias a los panfletos distribuidos por la Administración local.