La tercera ola del coronavirus amenaza a los presos de la cárcel de Sevilla-I y el Hospital Psiquiátrico Penitenciario de Sevilla donde se han declarado sendos brotes en los que se han confirmado ya al menos una veintena de positivos y habría un número indeterminados de reos en cuarentena.

Según han confirmado fuentes penitenciarias, en la prisión de Sevilla-I habían confirmado hasta este viernes su infección un total de 12 personas entre los que se encuentran dos funcionarios, un ATS, un educar y ocho internos de enfermería de la unidad de preventivos, que estarían todos aislados al igual que el resto de compañeros que han mantenido contacto con ellos y que no han sido diagnosticados. 

Las mismas fuentes señalan que en el Psiquiátrico Penitenciario se ha localizado con otros cinco empleados infectados entre los que se encuentran tres ATS, un celador y un funcionario de V1.

El Gobierno de la Nación hizo balance a principios de año de la afectación del virus en las cárceles sevillanas tras las pregunta del Grupo de Vox en el Congreso de los Diputados a este respecto. Según su respuesta, hasta 52 funcionarios de instituciones penitenciarias y 20 internos habían resultado hasta entonces positivos en coronavirus desde el inicio de la pandemia.

En el documento, fechado el pasado 11 de diciembre, se precisaba que en lo que respecta a empleados públicos, desde el inicio de la pandemia habían resultado contagiados 24 funcionarios de la cárcel de Sevilla I; 18 de la prisión Sevilla II, ubicada en Morón de la Frontera; cuatro del centro psiquiátrico penitenciario; tres de la cárcel de mujeres de Alcalá de Guadaíra y otros tres del centro de inserción social (CIS) de la provincia. En lo que a los internos se refiere, destacaban los 18 afectados en la prisión de Morón, más otros dos en Sevilla-I.