Los erasmus son los que más se quejan al defensor de la Hispalense

Los estudiantes que disfrutan, han disfrutado o quieren disfrutar de una ayuda Erasmus son los que más reclamaciones presentan en la Defensoría Universitaria de la Hispalense. Según consta en la Memoria Anual 2012 de esta institución elegida por el Claustro y encarnada actualmente por la profesora Rosa Muñoz, de las 262 reclamaciones que se presentaron durante el año pasado (un número extraordinariamente bajo si se tiene en cuenta que la comunidad de la Universidad de Sevilla ronda las 90.000 personas, entre alumnos, profesores y personal de servicio) un total de 63 fueron presentadas por estudiantes erasmus.

La memoria pone en evidencia el poco uso que hace la comunidad de la Hispalense de la Defensoría Universitaria. Por ejemplo, el Personal Docente e Investigador (más de 4.000 profesores de todas las categorías) apenas puso durante el pasado año 25 reclamaciones. Los concursos de plazas y contratos fueron las causas que generaron más reclamaciones oficiales ante la Defensoría (apenas 7), mientras que los conflictos con otros compañeros docentes generaron un total de seis quejas. Es muy llamativo que, pese a los problemas de infraestructuras y espacios que sufren algunos centros de la Universidad de Sevilla, especialmente centros como la Facultad de Medicina o la Escuela Técnica Superior de Arquitectura, sólo conste en la memoria una reclamación a este respecto.

Aún más bajo es el número de reclamaciones en el sector del Personal de Administración y Servicios (PAS). Las 2.440 personas que componen este ámbito en la Hispalense sólo pusieron un total de 12 reclamaciones durante el pasado año. Al igual que pasa con el sector del profesorado, los concursos y contratos fueron las principales causas de estas reclamaciones, apenas ocho.

Los estudiantes fueron los que pusieron más reclamaciones, un total de 225, una cifra también extremadamente baja si se tiene en cuenta que hay unos 80.000 alumnos en la Hispalense. Además de las ya indicadas por parte de los erasmus, destacan las 44 realizadas por la normativa de evaluaciones y calificaciones, así como las 40 por convalidaciones y homologaciones.

Porcentualmente, el 85% de las reclamaciones presentadas ante la Defensoría Universitaria de la Hispalense provinieron de los estudiantes, el 10% de los profesores e investigadores y el 5% del Personal de Administración y Servicio.

Pese a su escaso número, las reclamaciones son con mucha diferencia el motivo principal por el que los miembros de la comunidad de la Hispalense se acercan a la institución de la Defensoría. Tanto las consultas (101) como las mediaciones (28) arrojan, como se ve, números absolutamente marginales.

La memoria de la Defensoría deja también claro que los que reclaman sus servicios suelen preferir presentarse en sus oficinas en vez de usar otros medios tecnológicos. En total, 188 personas optaron por el modo de acceso presencial en la oficina del Pabellón de Uruguay, 124 por el correo electrónico, 40 presentando un escrito en el Registro general universitario (en las dependencias del Rectorado), 39 por vía telefónica y sólo tres -es un número muy llamativo- usaron la web que este servicio mantiene abierta (http://defensoria.us.es/).