Un escudo médico para una cumbre mundial

Acceder al dispositivo sanitario de la IV Conferencia Internacional sobre Financiación para el Desarrollo de la ONU en Sevilla, dispuesto en un pequeño habitáculo entre la inmensidad de una enorme zona para la prensa, es ver con tus propios ojos todo lo que se intuye que tiene que ocurrir para que en eventos multitudinarios como el que se vive estos días en el Palacio de Congresos (Fibes) no haya problemas ni peligros para la salud de los que prácticamente han convertido este espacio en su segunda casa, porque ya hay otros cuyo principal objetivo y reto es cuidar de ellos.

Un equipo de emergencias del 061 completo, compuesto por médico, enfermero y técnico, acompañados por un vehículo de soporte vital avanzado, además del personal de la sala del puesto de operaciones para gestionar todas las llamadas relacionadas con la cumbre, asume esa labor, preparados y perfectamente coordinados durante las 96 horas que dura la conferencia internacional. Para que, en resumen, todo vaya bien.

A este equipo se suman unidades móviles distribuidas por la ciudad durante el día —dos ECAs (Equipos de Coordinación Avanzada)— y otro dispositivo nocturno con UVI móvil y un equipo adicional, garantizando una cobertura sanitaria ininterrumpida.

En total, 11 profesionales diarios han formado parte de este operativo sanitario, que ha funcionado sin contratiempos, con eficacia y en coordinación con los equipos estatales, según explica el director del Servicio Provincial del CES 061 en Sevilla, Mario Pérez Díaz.

“Nos hemos encargado especialmente de la atención in situ en Fibes. Aquí, la mayoría de los casos han sido leves: mareos, vómitos, pequeñas heridas o traumatismos. Patología banal, en definitiva”, indica el director del servicio, que también ha estado cubierto por todas las calles de la ciudad con dos ENCA (Equipos de Coordinación Avanzada) del Distrito Sanitario Sevilla, y coordinado en red con los hospitales Virgen Macarena, Virgen del Rocío, San Juan de Dios y el Hospital de Valme para distribuir las posibles asistencias según la ubicación de las delegaciones.

Pero este dispositivo no sólo cubre lo que ocurre dentro de Fibes, también las llegadas y salidas de las delegaciones diplomáticas, sus recorridos en comitivas y las posibles asistencias que pudieran necesitar durante su estancia en los hoteles o en las cenas oficiales programadas. Aunque se han atendido a miembros de algunas delegaciones, no ha sido por problemas médicos graves. "Ninguna asistencia ha tenido relevancia crítica. Han sido cosas comunes que le pueden pasar a cualquiera", aclara Pérez Díaz.

El calor, por su parte, que en otras ocasiones ha supuesto un riesgo en eventos masivos, y teniendo en cuenta que se han superado los 40 grados, esta vez no ha generado sobresaltos. “Gracias a las medidas preventivas y al acondicionamiento del recinto, no hemos tenido casos por golpes de calor”, añade.

Con la responsabilidad que supone cuidar de la salud de los miles de asistentes de todos los rincones del mundo, en este operativo sanitario cada movimiento está medido. Pérez explica que llevan diseñando esta compleja operación desde hace varios meses, tras recibir la solicitud directa de Presidencia del Gobierno. “Se ha dimensionado en función de las necesidades previstas para el evento, incluyendo cobertura en el recinto Fibes, los desplazamientos de las delegaciones y sus estancias en hoteles y cenas oficiales”, detalla.

El 061 no está solo. Presidencia del Gobierno ha desplegado su propio dispositivo sanitario con equipos repartidos por todos los pabellones. "Ellos también cuentan con médicos, enfermeros, técnicos y hasta tres ambulancias de soporte vital avanzado. Una de ellas sin rotular, para casos más sensibles", detalla Pérez Díaz.