Sevilla

El 95% de los imbornales se limpiaron durante el año pasado

  • Los tanques de tormenta juegan un papel importante contra las inundaciones

La limpieza de la red de saneamiento de la ciudad tiene una incidencia directa en los efectos de la lluvia. Si las alcantarillas no evacuan el agua de manera correcta las calles puede acabar anegadas de agua. Según los datos aportados por el Ayuntamiento no sería este el caso de Sevilla. El año pasado se saneó el 95% de los imbornales de la ciudad, además de realizarse otras actuaciones habituales por parte de los técnicos de Emasesa.

De los 60.565 que hay contabilizados en las calles se limpiaron en 2013 un total de 57.900, el 95%, según los datos aportados por Emasesa. Dentro de la campaña anual de mantenimiento de la red de saneamiento se actuó en 319 de los 1.503 kilómetros de tuberías de la ciudad. También se limpiaron 8.614 pozos, se extrajeron 1.899 m3 de lodos y se inspeccionaron 26 km de la red con cámaras para identificar incidencias. Estas actuaciones tienen una especial incidencia en un mejor comportamiento de las instalaciones en el caso de lluvias, impidiendo inundaciones puntuales de viviendas y sótanos a la vez que se eliminan los atascos que impiden la normal evacuación de vertidos en las viviendas e industrias.

Fundamentales para que en Sevilla no se produzcan inundaciones son los tanques de tormenta. Se trata de un depósito de regulación de aguas pluviales contra inundaciones de la red de alcantarillado. Su función es laminar el caudal, gracias a su volumen de retención. Son especialmente recomendable en redes de pendiente escasa, como es el caso de Sevilla. En la actualidad Emasesa explota los del Arenal (Dos Hermanas), Parque Centro (Alcalá de Guadaíra) y el de la Alameda de Hércules, en Sevilla, que tiene una planta circular de 25 metros de diámetro, una profundidad de 25 metros y un volumen de explotación de 11.000 m3. Este depósito tiene la particularidad de que su vaso de retención era el antiguo recinto de la estación de metro, ejecutada en los años 70. El tanque de tormentas de la Alameda está situado estratégicamente, ya que al ser una de la zonas de Sevilla con menor altura sobre el nivel del mar, corría un alto riesgo de inundaciones ante posibles fuertes lluvias. Hay proyectados otros tanques en los aledaños de la Avenida Alcalde Luis Uruñuela, en Kansas City y en el recinto ferial de Dos Hermanas.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios