El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, ha pedido al Estado que se revise la normativa relativa a la contratación de las Administraciones públicas, motivo por el cual ha anunciado que, dentro del margen de maniobra con el que cuenta el Ayuntamiento al respecto, se confeccionarán pliegos “mucho más duros” para evitar que las adjudicaciones de los contratos se tengan que realizar a “bajas casi temerarias”.

En una entrevista concedida a Europa Press, Espadas ha mencionado el caso de la adjudicación de la reordenación de la calle Mateos Gago, en la que “ya podríamos estar en obras porque se habían presentado empresas potentes”. Sin embargo, la comisión ejecutiva de la Gerencia de Urbanismo aprobó a finales de julio iniciar el expediente de rescisión del contrato de estos trabajos e iniciar uno nuevo de contratación para que el proyecto se ponga en marcha en 2020.

“Se debería revisar la legislación estatal en la contratación administrativa, ya que cada vez encontramos más empresas que presentan bajas prácticamente temerarias y que después te dejan plantado porque fueron a llevarse la obra pero sin garantizar los costes reales y su viabilidad. Esto nos da muchos quebraderos de cabeza”, sentenció.

Espadas anunció pliegos de contratación pública “mucho más duros” para que se valore más la componente técnica que la oferta económica, “que ahora es prácticamente el único criterio”, a la par que se establezcan otras medidas para que sean empresas “más potentes” las que se hagan cargo de los proyectos.

El alcalde ha realizado un llamamiento a la responsabilidad empresarial y ha dejado claro que “si una empresa no tiene capacidad para desarrollar la obra en los términos en los que se ha ofertado, que no se presente”. “Penalizaría esa conducta si pudiera, pero está marcado por la ley estatal”, lamentó.

El proyecto técnico en Mateos Gago plantea, en primer lugar, la renovación de las principales redes de servicio de agua, alcantarillado, riego y alumbrado público, seguida de una reordenación y remodelación de la calle, marcada por la creación de una plataforma única, la cual facilita el tráfico restringido de vehículos, con acerados más amplios y calzada más estrecha. Con este planteamiento, se introduce una senda peatonal y se generan también itinerarios accesibles para garantizar el tránsito de personas con movilidad reducida.