La empresa del sector naval Sevilla Shipyard que se ha ofrecido al Puerto para reflotar los Astilleros de la ciudad, cerrados en 2011, es una sociedad limitada de creación muy reciente y con un exiguo capital social de 4.000 euros. Este dato contrasta con su oferta de invertir 4 millones de euros en los cuatro próximos años, como así lo aseguró esta semana a la prensa el presidente de la Autoridad Portuaria, Manuel Fernández. Si éstos son sus planes, la empresa tendría que ampliar el capital social para acometer esas inversiones. El presidente del Puerto declaró que esta propuesta empresarial cuenta con "viabilidad técnica y financiera".

A la espera de que trasciendan todos los detalles de la oferta empresarial, según los datos mercantiles, Sevilla Shipyard comenzó a operar el 28 de septiembre del año pasado dedicada a "la reparación, conversión y construcción de buques mercantes y objetos flotantes". Su domicilio social se sitúa en la carretera de la esclusa sin número y como administrador único figura Luis Ramón de Celis Landa, que fue nombrado como tal el 1 de octubre de 2012. De Celis aparece ligado, además, a actividades deportivas de golf. Este periódico intentó sin éxito localizarle.

Del proyecto también se ha anunciado hasta la fecha que esta sociedad podría generar 100 puestos de trabajo directos y cerca de 1.000 indirectos con su plan de invertir cuatro millones de euros en los próximos cuatro años, según datos del presidente de la Federación de Empresarios del Metal (Fedeme), Eusebio Gallego, que quiere que la empresa cuente con la industria auxiliar sevillana, que lo está pasando mal por falta de actividad.

La dirección de Fedeme ha concertado para la próxima semana una reunión con el empresario Luis Ramón de Celis para exponerle los tres requisitos que debe cumplir para tener el apoyo total de la patronal del metal. Según Fedeme, le plantearán que tenga "capacidad comercial para traer carga de trabajo, solvencia económica y compromiso con la ciudad", explicó ayer el gerente Carlos Jacinto Marín.

El escaso capital social de la empresa no preocupa a la Federación Provincial del Metal de UGT, para quien lo importante es la viabilidad del proyecto que traiga bajo el brazo la empresa que reflote los Astilleros. "A nosotros lo que nos interesa es el plan de viabilidad que tenga, porque hay empresas con un potente capital social que luego no invierten en nada", declaró ayer a este periódico su secretario general, Manuel Ponce. Añadió que le parece también importante que pueda haber personas con experiencia y dedicación en el sector naval que estén interesadas en crear algo en Sevilla para recuperar la actividad de los Astilleros. "Confiamos en que si alquien hace una propuesta, que sean personas dedicadas al sector naval", dijo.

El secretario general confesó que la federación desconoce por completo los detalles de la oferta empresarial presentada por Sevilla Shipyard al Puerto y que ha pedido a la Autoridad Portuaria de Sevilla tener acceso a ella. Los sindicatos insisten en que sería muy positiva la reactivación de los Astilleros de Sevilla.

El escaso capital social tampoco se ve como problema para el Puerto, que admite que Sevilla Shipyard es una sociedad reciente y llama la atención sobre "la buena opción" que sería recuperar los Astilleros.