Acudir al centro de Sevilla en coche privado se está convirtiendo en una auténtica odisea. Aunque el Plan Respira no se ha puesto aún en marcha (le quedan semanas), ya se empiezan a dar los primeros pasos para la restricción de la circulación de este tipo de vehículos en el Casco Antiguo. Los conductores que solían aparcar en el entorno de la parroquia de la Magdalena pueden hacerse una idea de lo que será dicho proyecto cuando se desarrolle, pues en la última semana han desaparecido las plazas de estacionamiento de esta zona.

La razón de dicha eliminación -como adelantó Diario de Sevilla- son las obras que acomete Endesa para mejorar la red del centro, que resulta deficitaria ante el aumento del consumo eléctrico por la llegada del turismo masivo tras las restricciones de la pandemia del Covid.   

La zona de actuación son las calles que integran el sector comprendido entre la calle Arjona y la Plaza Nueva. Desde la semana pasada se interviene en Canalejas y Cristo del Calvario, vías inmediatas a las parroquia de la Magdalena. La mejora de la red eléctrica ha supuesto levantar la zona de aparcamiento azul (pago por fracción horaria) que gestiona Ausa. Varias de estas calles, como la del Cristo del Calvario, han permanecido algunas jornadas cortadas por completo a la circulación de vehículos y haciendo muy complicado el tránsito de peatones. 

Las calicatas se han abierto en la banda de aparcamientos de Canalejas.

Aunque se supone que la pérdida actual de aparcamientos es momentánea y obedece a dichos trabajos, cuando éstos concluyan no se volverá a recuperar el 100% de los que existían hasta hace 10 días. Así lo han confirmado fuentes municipales a este periódico, que han asegurado que "se perderá media docena de plazas". Sin embargo, los vecinos de la zona aseguran que la merma será mayor y afectará a la totalidad de los estacionamientos de los que antes se disponía. 

En principio, la mejora de la red eléctrica no debía traducirse en una reducción de aparcamientos, pero las obras llevan aparejadas una reurbanización de las calles, concretamente, de Canalejas. El Ayuntamiento precisa que "aprovechando las canalizaciones de electricidad de Endesa, en las tareas de reposición del pavimento por parte de la compañía se procederá, como compensación y de acuerdo con la Gerencia de Urbanismo, a ampliar un tramo de acerado y hacerlo, así, más accesible". "Las plazas de aparcamiento que se eliminan para ampliar el acerado no llega a media docena", detallan fuentes municipales. 

Según los residentes de esta calle, el tramo donde la acera ganará metros es el que concentra un mayor número de bares, que ya cuentan con terrazas cada uno de ellos. Temen que la reducción de aparcamientos se aplique por completo en esta vía, que conecta Marqués de Paradas con San Eloy. 

Los trabajos se encuentran ya en un estado muy avanzado.

Los vecinos y trabajadores de la zona consideran un "error" esta pérdida de plazas de estacionamiento, que hará más complicada la movilidad en el entorno, que ya sufrió una importante alteración en la circulación con la peatonalización de la Plaza de la Magdalena, lo que provocó, entre otras consecuencias, que la línea de autobús que conecta dicho enclave con Triana se trasladara a mitad de la calle Reyes Católicos.

Unas restricciones que anticipan el cierre al tráfico privado del centro de la ciudad, el cual empezará a aplicarse en pocas semanas cuando entre en vigor el polémico Plan Respira, que recupera el espíritu del Plan Centro que ya se puso en marcha durante el último mandato de Alfredo Sánchez Monteseirín.