¿Qué es el pulgón negro y cuáles son sus riesgos para los naranjos de Sevilla?

La Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía ha detectado el primer foco del pulgón negro de los cítricos en Sevilla. Transmisor del conocido como virus de la tristeza, su presencia se ha hecho constar en los troncos y ramas de 200 naranjos situados en el Parque de María Luisa y el Puerto de Sevilla. Tal y como advirtió el organismo hace unos días, y así lo recogió este mismo periódico, de convertirse en plaga podría poner en riesgo la producción agrícola.

El virus de la tristeza parecía haberse atajado hace décadas. No obstante, la Junta insta a la tranquilidad, enviando un mensaje de calma a los ciudadanos en el que asegura que “se trata de un tema muy puntual y localizado, que no tiene por qué ir a más”. Asimismo, añade la administración, “los responsables de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Sevilla y de mantenimiento de la Autoridad Portuaria se han puesto manos a la obra y ya se está tratando dicha plaga”.

¿Qué es el pulgón negro?

Nos encontramos ante un insecto que, bajo el nombre científico de toxoptera citricida, puede causar daños importantes en plantas cítricas jóvenes con escasa biomasa vegetativa. Según la página web Plantix.net, “los pulgones tienen aparatos bucales largos y penetrantes que usan para chupar la savia en las puntas de los brotes y en las hojas jóvenes, lo que produce deformaciones en las ramitas e inflorescencia”.

“Cuando se alimenta sobre las plantas produce grandes cantidades de mielecilla, que se acumula en las hojas y favorece el desarrollo de hongos causantes de la negrilla, la cual puede disminuir la tasa fotosintética”, añade la Dirección General de la Producción Agrícola y Ganadera de la Junta de Andalucía en un informe sobre este mismo asunto.

Asimismo, “una sola colonia del insecto, al succionar la savia de los tejidos inmaduros, puede causar enrollamiento de los foliolos y distorsión de brotes inmaduros”, prosigue el texto. Sin embargo, más allá de este daño considerado “directo”, lo más preocupante es la capacidad del insecto de transmitir el virus de la tristeza, algo que indirectamente generaría un gran problema para el árbol.

El virus de la tristeza en los cítricos

El pulgón negro de los cítricos es considerado como una de las plagas más importantes en las plantaciones de naranjos y otros árboles cítricos por ser el vector más eficaz del virus de la tristeza. Según el portal especializado, Intagri, los principales síntomas de esta enfermedad son los siguientes:

• Tristeza. De ahí el nombre del virus. Este proceso se caracteriza porque se desencadena un decaimiento, ya sea más rápido o más lento, caracterizado por una clorosis (insuficiencia de clorofila) y una defoliación (caída prematura de las hojas), asociado a su vez a la pudrición de las raicillas.
• Acanaladuras en la madera. Se generan deformaciones que llevan a “una pérdida de la productividad en el cultivo de cítricos".
• Amarillez de plantas. “Normalmente ocurre bajo condiciones de invernadero en forma de clorosis intensa”, concluye Intagri.