Un punto de referencia para la literatura

Inmaculada Calderón fue profesora de Latín y Griego hasta que montó su propia librería hace siete años. "Me enamoré de la literatura desde pequeñita", asegura. Por ello, es librera, editora y escritora. Le encanta la poesía y los clásicos que marcaron su vida, como García Lorca, Neruda o Delibes. En su faceta como autora, escribe poesía y trata lo multicultural. Sin embargo, reconoce que es "muy mala comerciante". El Gremio de Librerías es "la única asociación profesional que aglutina el sector de las librerías en Sevilla y provincia", según su presidenta, pero el hecho de estar agremiado es "libre". Por ello, explica que esta asociación es útil porque ofrece formación y "da apoyo a los libreros en sus problemas cotidianos y los conflictos que puedan surgir". Inmaculada añade que "con la problemática específica que tienen las librerías, hay que atenderlas de manera asociada y como sector". "Es un gremio honesto y honrado, pues trabajamos con un precio fijado", asegura. Entre las actividades que organiza la asociación destacan las de animación a la lectura para el público en general, y es que "una librería debe ser un punto de referencia y dinamización cultural, un espacio mágico", comenta. Inmaculada insiste en la importancia de estimular a los niños y los jóvenes para que lean y, por eso, trabaja para "animarles a escribir sus propias historias".