Qué es el renting de coches, qué tipos existen y cuáles son todas sus ventajas

Mientras que tradicionalmente la única forma que había de disponer de un vehículo era comprarlo, ahora hay alternativas tan eficaces como el renting de coches, que se están haciendo realmente populares entre los usuarios de nuestro país. Vamos a conocer a continuación en qué consiste exactamente este sistema de alquiler de vehículos, las diferentes modalidades que existen y todos los beneficios que puede suponer para los usuarios en materia de comodidad, flexibilidad y ahorro de dinero.

Un vehículo es un elemento esencial en nuestra vida cotidiana, que nos permite poder desplazarnos cómodamente siempre que queramos, para ir a trabajar, hacer la compra o realizar algún tipo de viaje. Pero un coche es también una inversión de dinero importante para nuestra economía, y como tal, es necesario conocer bien cuáles son las alternativas más interesantes y beneficiosas que podemos encontrar actualmente en el mercado, para acertar al 100% a la hora de adquirir un vehículo que se adapte completamente a nuestras necesidades.

Tradicionalmente, comprar un coche siempre ha sido la opción más demandada por los usuarios, a pesar de tener aparejadas una serie de inconvenientes tan importantes, como su elevado precio, el desembolso inicial, todas las gestiones de papeleo en relación a los seguros, y demás, así como el dinero que puede suponer mantenerlo en buenas condiciones cada mes para circular. Es por eso que, actualmente y para evitar este tipo de problemas asociados con la compra de un vehículo, una alternativa cada vez más popular entre los usuarios y que ha ido adquiriendo fuerza con el paso de los años, es el renting coches.

Qué es el renting de coches

Se trata básicamente de firmar un contrato de alquiler con una empresa de coches por el que nos ceden un vehículo para nuestro uso durante un periodo de tiempo, a cambio de un pago mensual previamente acordado mediante dicho contrato. Este tipo de alternativas para la movilidad han sido siempre muy utilizadas por las empresas y los autónomos, pero gracias a todas sus ventajas, en los últimos años ha dado el salto a su uso entre particulares. Normalmente, el periodo de duración de un contrato ronda los cuatro años, pero también podemos encontrar contratos de quince o sesenta meses, en función de cómo sean las condiciones que queramos obtener.

De esta forma, podremos disponer de un coche para nuestro uso de una forma mucho más barata, solo haciendo unos pagos mensuales y sin tener que hacer un gran desembolso inicial. Pero también supone no tener que hacer ningún tipo de papeleo relacionado con el coche o con el seguro, por lo que tan solo tendremos que preocuparnos básicamente de echar gasolina. Una vez que nuestro contrato termine, tendremos la posibilidad de volver a iniciar otro contrato y elegir otro coche, e ir probando cada vez diferentes modelos, sin tener que quedarnos siempre con el mismo y evitando los problemas asociados con el tiempo de uso.

Tipos de renting

A la hora de realizar un contrato de renting, es importante tener en cuenta una serie de factores básicos que nos ayudarán a sacar el máximo partido a nuestro alquiler. Por ejemplo, tenemos la opción de elegir un tipo de renting flexible que nos permite disponer del coche por meses y cambiar sin problemas de vehículo, sin penalizaciones, pero teniendo que abonar una cuota mensual algo más elevada. También existe el renting de ocasión, que permite adquirir en propiedad el vehículo que hayamos estado utilizando, una vez que finalice nuestro contrato de alquiler y a un precio muy asequible.

Además, otra serie de características importantes en nuestro contrato que tenemos que conocer, tienen que ver con la existencia de algún tipo de limitación de kilometraje o de penalización por hacer un uso exagerado del coche, lo que supondría tener que abonar una cantidad de dinero previamente acordada si no cumplimos con este tipo de cláusulas.