El estado de sequía que padece la mayor parte de España y, en especial, la provincia sevillana no resulta ajeno a la Archidiócesis de Sevilla, que ha enviado una circular en la que anima a pedir en las eucaristías por la llegada de la lluvia.
Así lo ha solicitado el vicario general, Teodoro León, en un escrito en el que pide a sacerdotes, religiosos, diáconos y laicos incluir esta rogativa en los oficios religiosos que se celebren de ahora en adelante y hasta que aparezcan las precipitaciones.
En dicha circular, el vicario recuerda que unas de "las grandes preocupaciones", no sólo de los que viven en el mundo rural sino también en las ciudades, y no sólo en Andalucía sino también en el resto de España, es la falta de lluvia, "la gran sequía que padecemos".
"Apoyándonos en las palabras de Jesús: 'lo que pidáis al Padre en mi nombre yo os lo concederé' (Jn 14,13), y siguiendo las indicaciones del Consejo Episcopal, os invito a todos a rezar a Dios con confianza por el don de la lluvia necesaria en estos momentos", establece el vicario en el escrito.
Además, pido a los sacerdotes que incorporen una petición por la lluvia en las preces de la misa, así como en la oración de laudes y de vísperas, en la exposición y adoración del Santísimo y en cualquier otro tipo de oración extralitúrgica comunitaria que se celebre en nuestra archidiócesis. Se encomienda especialmente esta plegaria a las comunidades de monjas contemplativas", abunda Teodoro León.
Del estado de sequía que asola al campo sevillano y del riesgo que supone para el sistema de abastecimiento de agua para el consumo humano se han hecho eco desde hace varias semanas parroquias y hermandades, que han incluido esta petición en sus misas y cultos.
Rogativas por la lluvia
No debe olvidarse que antiguas advocaciones de la capital andaluza, como el Cristo de San Agustín o la Virgen de los Reyes, han salido durante siglos en procesión de rogativas para implorar la llegada de la lluvia. La última vez que la Patrona de la archidiócesis lo hizo con tal fin fue el 15 de enero de 1993, cuando la provincia sufría uno de los periodos más secos de su reciente historia.
El vicario también recuerda que el misal romano contiene una oración colecta para pedir la lluvia, "que sería bueno utilizar cuando esté permitido litúrgicamente". Este tipo de rezos se conoce con el nombre latino de Ad petendam pluviam y aunque han llegado hasta nuestros días gracias a la tradición católica, las antiguas civilizaciones ya realizaban este tipo de imploraciones para recibir el agua del cielo.
