Un testigo protegido sitúa a la Perla en el tiroteo de las Tres Mil

Un testigo protegido que presenció el tiroteo de las Tres Mil Viviendas en el que falleció una niña de 7 años ha asegurado a los investigadores que la matriarca del clan de la Perla, María del Carmen B., estaba presente en el momento en que se produjeron los disparos e incluso empuñaba una de las armas de fuego y efectuó algunos de los disparos, según han confirmado a este periódico fuentes del caso.

En la causa que investiga el juzgado de Instrucción número 20 de Sevilla hay actualmente dos testigos protegidos, personas que presenciaron los acontecimientos que sucedieron la noche del pasado 21 de agosto y que permanecen en el anonimato por motivos de seguridad. Uno de estos testigos aseguró que los participantes en el tiroteo eran miembros del clan de la Perla, pero dijo que no podía identificar personalmente a ninguno de ellos.

El segundo testigo presencial que ha rendido testimonio y al que se le ha concedido protección sí que identifica, en cambio, a las personas que intervinieron en la agresión. En concreto, este testigo sostiene que María del Carmen B., la Perla, intervino en el tiroteo y, para acreditarlo, afirma que escuchó cómo un hijo le advertía que tuviese cuidado después de que uno de los disparos se le fuese para las viviendas ubicadas encima de la que pretendían alcanzar. "Mamá, ten cuidado que vas a matar a los vecinos de arriba", asegura el testigo protegido que fue la frase que pronunció el hijo de la Perla.

Las mismas fuentes también han señalado que este testimonio viene corroborado por la madre de la niña, que ha declarado que vio a la Perla junto a los otros participantes del clan aquella noche.

Todos estos datos se han conocido una vez que el juzgado decidió levantar, la semana pasada, el secreto de sumario que pesaba sobre las actuaciones. El desencadenante del tiroteo fue el secuestro de un hijo de la Perla, que sufrió diversos golpes y le arrebataron un cordón de oro, lo que motivó que un grupo de miembros del clan de la Perla acudiera al domicilio de Los Mariano para pedir explicaciones.

En el tiroteo se produjo la muerte de la niña, que estaba cenando con sus padres, quienes no tenían relación con la disputa. Los Perla habrían matado a la niña por error al confundir la vivienda en la que ésta vivía con la casa de un delincuente apodado Faíto, implicado en el secuestro del hijo de La Perla.

La Policía detuvo a un total de 11 personas en relación con la muerte de Encarnación S. S., que tenía siete años. La última detención se produjo el pasado viernes, 13 de septiembre, cuando los investigadores detuvieron en Mérida a Gregorio B. H., de 41 años y hermano de la Perla.

Según la Policía, este hombre, que ya está igualmente en prisión provisional, habría participado activamente en los disparos que acabaron con la vida de la menor y, a continuación, se marchó del Polígono Sur. En vez de ir con el resto de su familia a Mijas, donde fueron detenidos nueve integrantes del clan apenas 48 horas del suceso, este hermano de la matriarca se fue a Extremadura.

De los miembros del clan encarcelados, únicamente Antonio G., apodado el Coleta, esposo de la Perla, y un hijo reconocieron haber efectuado los disparos con una pistola y una escopeta, pero en su defensa han argumentado que abrieron fuego después de que fueran recibidos a tiros por los integrantes del clan de los Mariano. Los otros miembros de la familia de la Perla, que llevaban palos, han declarado que emprendieron la huida al oír los disparos.

Los encarcelados han tenido que ser dispersados en varias prisiones para evitar incidentes con integrantes del clan rival. Todos están acusados de delitos de homicidio y tenencia ilícita de armas, entre otros.