El presidente del Sevilla, José Castro, ha atendido este mediodía los micrófonos de Canal Sur Radio, haciendo un repaso a las sensaciones que se viven en la entidad sevillista en estas vísperas de la final contra el Inter de Milán. Castro se ha mostrado seguro y optimista respecto a las posibilidades de los suyos en esta final y, sobre todo, ha proclamado su orgullo por luchar contra gigantes económicos y dejarlos encima en el camino.

Castro debía explicar de nuevo su famosa frase ya de "¿otra vez? Sí, otra vez". "Es una frase que nació con Platini en el segundo o tercer título que conseguimos desde que soy presidente. ¿Otra vez? Pues sí, otra vez, la frase se hizo viral y otra vez estamos en una final. Es la cuarta como presidente en la Europa League, las tres las hemos ganado y esperemos que ésta sea igual, pero sabiendo lo complicado de la hazaña, estamos luchando contra un equipo con más del doble de presupuesto que nosotros y con el máximo respeto, pero vamos a intentar ganarles".

"¿La final más difícil? Imagínese cómo era la del Liverpool"

Se le apunta al presidente sevillista que tal vez sea la final más complicada de todas las disputadas hasta ahora, pero el utrerano salta con rapidez para desmentir semejante afirmación: "Imagínese cómo era la del Liverpool, pero a nosotros nos gustan las cosas difíciles, les recuerdo a los tres equipazos que hemos eliminado aquí, todos muy por encima nuestra en cuanto a presupuesto, en cuanto a tener una plantilla competitivamente y los hemos eliminado. Sabemos lo difícil que es, pero sabemos que nosotros nos transformamos en esta competición y que somos capaces de cualquier cosa. Y eso es o ganar o ganar, cualquiera de las dos la podemos elegir".

Se le interpela por las críticas que había recibido Julen Lopetegui durante estos meses en el Sevilla y hasta dónde ha llegado el equipo. "El fútbol ya sabemos que es así, que los aficionados tenemos poca paciencia, pero ahí está lo que están consiguiendo el entrenador y Monchi con un equipo nuevo, con 11 jugadores nuevos, un entrenador nuevo... A veces no nos damos cuenta de lo difícil que es. Entrar en Champions en dos jornadas antes en una Liga tan competitiva como la nuestra y si además bordamos la temporada con el título de la Europa League eliminando a los equipos que hemos eliminado, sería imposible mejorar la temporada, sería un éxito brutal. Eso queremos conseguir y lo vamos a intentar".

Recuerda entonces Castro el pesar por la ausencia de la afición sevillista en esta final: "Es una auténtica pena, sabemos lo que son las finales y el colorido que nuestra afición es capaz de dar y ese apoyo incondicional a nuestra plantilla, pero son las circunstancias y lo único que podemos hacer lo que estamos aquí, tanto los reservas como los directivos, es gritar y animar a nuestro equipo, que en un silencio como el que hay ahora, los jugadores lo notan y les llega, sin duda alguna. Disfrutamos con la victoria y podemos disfrutar con los partidos y podemos animar y ayudar a los jugadores desde la grada. No está nuestra afición, pero tratamos de suplir a nuestra afición con nuestras voces hasta quedarnos afónicos".

"Darles felicidad a la gente, a los sevillistas, en un año tan difícil como éste es algo que no tiene precio"

El dirigente nacido en Utrera también le lanzaba un mensaje a sus aficionados: "Vamos a hacerlo por ellos, por nuestra afición, que está en un año tan complicado, hay mucha gente que está sufriendo, y la verdad es que el darle felicidad a la gente y a los nuestros no tiene precio, es para estar orgullosos. Los sevillistas son inteligentes y ayudan siempre a nuestro equipo en los momentos difíciles, ahora no están, pero sí ven lo que estamos haciendo este año, ven que somos el único club de España que queda en competición europea. Y ven que mientras otros ya han empezado la próxima temporada nosotros somos el único club que todavía está jugando en la presente temporada y que todavía pensamos en conseguir gloria. Nuestros aficionados y nosotros nos sentimos tremendamente orgullosos de lo que estamos haciendo".

Una cuestión de logística es saber si la Supercopa sigue fijada para el 24 de septiembre en Budapest. "La cita del 24 en la final de la Supercopa creemos que es inevitable, los calendarios están muy apretados con lo del Covid y todo está muy retrasado. Nos está tocando vivir un tiempo diferente, pero sólo debemos pensar en ganar y en que nuestra afición está soñando con la plata, con tener otro título en nuestras vitrinas y, sobre todo, orgullosos. Un equipo como nosotros, con nuestro presupuesto que no llega a 200 millones, llevamos 11 finales europeas desde el 2006 hasta el 2020 y somos el equipo de Europa que más finales ha jugado en este tiempo. Es para estar supercontentos".

¿Qué importancia tienen estos logros deportivos dentro de la situación económica generalizada del fútbol mundial por la pandemia? "El fútbol es pasión, es sentimiento y lo primero es conseguir títulos y cosas importantes, pero lo segundo es la economía. No nos cansamos de crecer, nuestra línea está en eso porque nuestra ambición es así. Estar cada vez más alto en Europa significa estar cada vez más alto en economía, en ingresos que son muy importantes. Es fundamental para nuestra intención de estar entre los cuatro primeros equipos españoles, con lo difícil que es, para que no sea estar en Champions de vez en cuando sino estar todas las temporadas, porque sin duda es el torneo que da más importancia, más privilegio y más dinero y eso es bueno para seguir creciendo en nuestra entidad".

En el epílogo, Castro lanzaba una nueva proclama: "Recordar que aquí está el club para dar alegrías, somos una empresa de las más importantes de Andalucía, una empresa que genera riqueza y lo que es más importante, felicidad. Por ello, como sevillista me siento enormemente contento y un privilegiado por ocupar el cargo que ocupo, porque la felicidad no tiene precio y el darle felicidad a la gente es increíble".