Feliz por la victoria, aunque molesto y preocupado por el tremendo calor que sufrió el aficionado que acudió al Ramón Sánchez-Pizjuán a ver a su equipo, compareció Eduardo Berizzo tras la victoria de su equipo ante el Málaga. El técnico argentino habló sin pelos en la lengua sobre este aspecto.

"La gente estuvo tres horas con un calor enorme en las gradas. No hay que ser muy inteligente para saber que a las cuatro de la tarde en Sevilla hace calor y que este partido se podía haber jugado a las diez de la noche sin problemas. Pensando en la gente, creo que la elección de esta hora es totalmente contraproducente y no creo que la televisión tenga la necedad de no saber que aquí a estas horas hace mucho calor", explicó el entrenador sevillista.

¿Cómo llega su equipo al parón? "Llegamos lanzados, dando pasos hacia delante", asegura el preparador sudamericano. "Los partidos nos dejan muchas cosas a favor, aunque hay otros con menos y siempre con revisiones. Necesito aún poner a tono a algunos jugadores a los que no les he podido dar minutos. Este parón servirá para ponerlos a tono con partidos ante los equipos inferiores. Mi opinión sobre la plantilla era muy buena antes y ahora confirmo todo", añadió.

Los números son horrorosos, no hace falta que nos lo digan y no hay que poner excusas"

Sobre la decisión de alinear a Muriel en detrimento de Ben Yedder, el técnico tiene claro que quiere dar minutos a todos, sobre todo si responden, como el sudamericano, con un gol. "Me lo ponen muy difícil. Quise ser coherente con la idea principal que tengo sobre los jugadores, que todos se sientan protagonistas. Que la actuación de uno no eclipse a otro. Me gusta que Ben Yedder haya marcado tres goles en Liga de Campeones y me agrada que hoy Luis haya marcado en casa. Eso refuerza la confianza en ataque", señaló Berizzo, quien defendió la titularidad de David Soria: "Cuento con dos porteros de garantía y David necesitaba un partido como el de hoy".

Sobre el encuentro, el argentino entendió que en la segunda mitad se vio a un equipo mucho mejor, sobre todo con orden, ya que en el primer acto el equipo quizás pecó de precipitación.

"Creo que el equipo movió la pelota con fluidez e imaginación. En la primera parte quizás pecamos de ansiedad y terminábamos las jugadas más rápido de lo que queríamos, por eso cometimos muchos fueras de juego. En la segunda parte, ellos defendieron con mucha gente y hasta pasado mucho tiempo no pudimos romper su barrera. Cuando jugamos con más precisión, hicimos más ocasiones. Y si nuestros rivales sufren grietas, nosotros las encontramos", explicó el técnico sevillista.