¡A Budapest! El Sevilla se ha cargado a la Juventus de Turín. Y luchará por su séptima UEFA Europa League el próximo 31 de mayo en la capital de Hungría frente a la Roma de Mourinho (1-0 en Roma y 0-0 en Leverkusen).
Sí, han leído bien. ¡¡¡El Sevilla de Mendilibar se ha cargado a la Juventus de Allegri!!!
Qué barbaridad de partido. Un partido memorable. Espectacular. Con remontada sobre ¡LA JUVENTUS! Con un futbolista menos en los angustiosos minutos finales por la expulsión de Acuña en el 116... Pues lo ha conseguido el viejo zorro vizcaíno.
El milagro se ha consumado. Y Nervión se ha convertido en un manicomio. El manicomio de Nervión. ¿Pero cómo es posible esto, hombre? ¿Qué ha hecho este señor de 62 años, debutante en estas lides europeas, para llevar a una final continental a este grupo que miraba al abismo de la Segunda División?
Lamela durante la celebración de su gol, que marcó a pase de Bryan.
Y eso que Makkelie se tragó dos penaltis, uno de Fagioli por manos al controlar un balón en el área, discutible, y otro clamoroso de Cuadrado, que derribó claramente a Óliver Torres sobre la raya del área. El VAR se desentendió. Hasta con eso pudo ese Sevilla que hizo buenos sus lemas: el nunca se rinde, la casta y el coraje. Y reescribe de nuevo su propia leyenda.
Marcó Vlahovic en el 65. Igualó Suso con un auténtico golazo en el 72. Y Lamela marcó de cabeza a centro de Bryan Gil en el minuto 95, ya en la prórroga. Luego, en el minuto 116. La Juve quemó sus naves, apretó, pero Nervión y el Sevilla respondieron como un titán invulnerable. El Sevilla luchará por su séptima UEFA Europa League. Parece increíble, pero es verdad...
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