Después de que la paz social firmada por los máximos accionistas del Sevilla Fútbol Club Sociedad Anónima Deportiva apaciguara el gallinero en el que se estaba convirtiendo la gobernalibilidad del club y casi llevara durante siete meses a Sevillistas Unidos 2020 a un latente olvido, la extraña sociedad que entró en el accionariado de la mano de la alianza que formaron José Castro, Francisco Guijarro y las familias Carrión y Alés vuelve a aparecer con la intención de hacer ruido, supuestamente aliándose con el que iba a ser su enemigo, el ex presidente y máximo accionista a nivel individual José María del Nido Benavente.

Evidentemente, si a alguien perjudicaba ese pacto por la gobernabilidad era al “socio americano”, como se conoce a esta sociedad que invirtió nada menos que 10 millones de euros en la compra de acciones hasta conseguir tener la titularidad del 6,28% del capital social del Sevilla, según figura en el libro de registros de acciones.

¿Pero quién o quiénes están detrás de esta sociedad al que el sevillismo no es capaz de ponerle cara, más allá de la de un Andrés Blázquez que aparentemente no es más que un hombre de paja que ni siquiera asistió a la última Junta General de Accionistas en la que, encima, era nombrado como consejero?

Entre Delawere y Miami, Florida

La sociedad Sevillistas Unidos 2020 nace como tal el 6 de junio de 2018 tras el cambio de nomenclatura de otra adquirida, a su vez, por otra sociedad creada en Delawere tres meses antes (el 4 de marzo) llamada Nutmeg Adquisition LLC. Precisamente la particularidad de estados como Delawere permite que los propietarios de las sociedades constituidas en su suelo permanezcan ocultos y se constituyan en un solo día. No obstante, gracias al trabajo de investigación que realizaron miembros de Accionistas Unidos, se pudo conocer que esta sociedad desembarcó en España al adquirir en abril de ese mismo año Global Kengai SL, que pasa a llamarse Triple Siete Adquisiciones SL, justo la que en junio se convierte en Sevillistas Unidos 2020.

Información de la sociedad 'Sevillistas Unidos 2020' en el registro del CSD sobre los propietarios del Sevilla.

Comoquiera que en España la legislación deportiva obliga a que el Consejo Superior de Deportes (CSD) tenga conocimiento de las personas que están detrás de las empresas que participan de los clubes profesionales, se sabe que la propiedad de Sevillistas Unidos 2020 se la reparten tres estadounidenses. Steven W. Pasko, Wayne Boisch y James Pulasky, que tienen un 50% de su capital el primero y 17,33% los dos restantes. Ésa es la información que figura en el CSD. Queda casi un 15% cuya propiedad se desconoce y en la que es posible que figuraran esos “22 sevillistas” que Castro en sus primeras referencias a esta sociedad cuando entró en el accionariado indicó que habían aportado como pequeñas inversiones con el objetivo de salvaguardar que el Sevilla estuviera siempre en manos sevillistas.

Según las investigaciones de Accionistas Unidos, Pasko, Boisch y Pulasky figuran como administradores y creadores de otra sociedad, 777 Partners LLC, registrada en Delawere y con sede en Miami, una empresa de inversión privada que entra en sociedades con alto crecimiento, preferentemente enfocada en los servicios financieros.

28 sociedades... con nulo movimiento inversor

Lo primero que llama poderosamente la atención de esta entidad de inversiones es que cuenta en su portafolio de empresas con 28 sociedades adquiridas total o parcialmente que apenas tienen actividad, así como nula presencia en redes sociales, como si se tratara de sociedades fantasma. Una de ellas incluso, una aseguradora llamada 777 RE LDP, tiene sede en Bermudas, paraíso calificado como “gris” por la Comunidad Europea en materia fiscal. Desde su creación sólo figura una operación, precisamente con su matriz 777 Partners, que a su vez sólo tiene 5 seguidores en Twitter y no ha emitido ningún tuit.

El resto son sociedades que poco o nada tienen que ver con el deporte y que gozan de una posición irrelevante. Una aerolínea canadiense ultra low cost prácticamente en quiebra, una plataforma de TV online (Fanatiz), una financiera de cine y TV (Film Finances), cuya última película en la que participó fue en 2016..., son algunas de las empresas que aparecen asociadas a estas tres personas que figuran como propietarios de Sevillistas Unidos 2020.

El Girondins de Burdeos

Accionistas Unidos avisó en la última Junta General, sin que tuviera una mínima repercusión, de la conexión de estas empresas con el Girondins de Burdeos. Y es que en la web de 777 Partners, que tiene el mismo domicilio que la dueña de Sevillistas Unidos 2020 (600 Brickell Avenue, piso 19, en Miami), aparecen otros dos nombres como miembros de su junta directiva, John J. Sicilian y Thomas F. Staz, que también entran en juego en una sociedad vinculada al club francés, 1848 Capital Partners.

Uno de los fundadores de esta empresa, Joseph da Grosa, ya aparece en la prensa francesa como interesado en la compra del Girondins, que se lleva a cabo a través de una sociedad francesa constituida, según France Football, con el capital social de un euro. A través de otro holding de sociedades creadas en Francia y en Luxemburgo, y con sólo 16% de las acciones, Da Grosa se colocaría en noviembre de 2018 al frente del Girondis, pero con cláusulas que le otorgan derecho a voto en determinadas cuestiones. Lo curioso es que, tras sólo un año en el club, lejos de aportar músculo financiero a la entidad gala, bajo el control americano se produce una venta de jugadores por valor de 42 millones de euros (entre ellos el sevillista Koundé, por 25), mientras que la inversión en fichajes apenas llegó a la cifra de 7 millones.

Conexión de sociedades y nombres que conectan la participación de estos inversores en el Sevilla y en el Girondins de Burdeos.

Las tensiones entre los grupos que formaban el club no tardaron en llegar y en la prensa local se refiere incluso cómo el 4 de dicembre aficionados saltaban al césped como protesta y detenían un partido durante 20 minutos. Al final, Da Grosa abandonaría el club y la sociedad que lo colocó busca compradores.

¿Cuál es papel actual de Sevillistas Unidos 2020’?

Evidentemente, ni Pasko, ni Boisch ni Pulasky, los propietarios de Sevillistas Unidos 2020, tienen intención de aparecer por Sevilla. Los que están cerca de las negociaciones en cualquier caso hablan de un socio de origen israelí, Joshua Wander (socio de 777 Partners), que es quien aportaría, sin aparecer por ningún lado, el capital. Por ejemplo, para la adquisición de acciones, la sociedad propietaria de Sevillistas Unidos 2020, Nutmeg Adquistion SLL, invirtió casi 10 millones de euros, más de 7 en títulos y un millón largo en pago de comisiones. Se habla también de créditos ofrecidos a determinados sevillistas para la compra también de acciones en aquella carrera por comprar de hace un año.

Evidententemente, hizo esa fuerte inversión con dos objetivos: uno, para tener un cierto control sobre el club y sus movimientos y, dos, para recuperar ese dinero y multiplicarlo (era vox populi que estaba previsto un pase). Sin embargo, con la paz firmada entre los bandos de Castro y Del Nido, no podía tener acceso ni a una cosa ni a otra, aparte de que se siente de alguna manera traicionada en los acuerdos que firmó con la alianza que forma el actual consejo. Incluso se habla de que amenaza con sacar documentos que comprometerían a Castro.

Los movimientos anunciados por el ex presidente (a los que por último le ha puesto fecha para cuando el equipo acabe de competir en la Europa League) podrían cambiar la actual posición de Sevillistas Unidos 2020 si, como se ha especulado, llega a un acuerdo para apoyar a Del Nido. ¿Cómo? No se sabe. Lo que sí es seguro es que tras invertir 10 millones de euros, los americanos lo unico que sacan de rédito en la actualidad son unos 282.000 euros que le corresponderían por el reparto de dividendos de ese 6,28% de acciones que, de momento, están registradas a su nombre.

Quedan incógnitas por resolver, pero las cartas se están barajando. Y el socio americano es, sin duda, un comodín valioso que todos los bandos aprecian.