Primera alegría para los sevillistas en la Liga después de 84 días sin saborear un triunfo. El debut de Quique Sánchez Flores en el banquillo tuvo un sabor muy dulce y los nervionenses firmaron incluso una goleada en su visita al Nuevo Los Cármenes.

Soumaré | Quique les pide que se diviertan y le hizo caso en el eje

Soumaré comete una falta en el centro del campo.

El nuevo entrenador sevillista hizo hincapié en la rueda de prensa posterior a su primer triunfo al frente del equipo en que desea que sus futbolistas vuelvan a divertirse en un campo de fútbol. Soumaré le hizo caso y protagonizó controles orientados espectaculares cuando el rival lo presionaba para salir por el otro lado, algunos de ellos cargados de plasticidad con taconcitos. Además, desahogó con los pases al compañero que siempre estaba libre y también ayudó a los defensas.

Sergio Ramos | Del cabezazo imperial al mando absoluto

Sergio Ramos cabecea el tercer gol sevillista.

Primer gol en la Liga con la camiseta sevillista después de los que anotó en Champions (PSV y Lens) y en la Copa del Rey (Astorga). Fue, por tanto, el primero que acabó en triunfo digno de ser celebrado y el central camero se vino arriba a partir de ese momento para lucirse en la faceta defensiva. Toques precisos en la presión del rival, incluso con el pecho, estuvo sobrado.

Óliver Torres | Mucho mejor viendo el fútbol de cara

Óliver Torres persigue a Bryan Zaragoza.

Quique Flores lo situó más retrasado que en los últimos tiempos como sevillista y viendo el fútbol de cara su rendimiento mejoró de manera exponencial. No le hizo falta darse la vuelta cada vez que recibía el balón, como lo suele hacer cuando está en posiciones más adelantadas y quiere asegurarse la pelota. En esa acción de asegurar pierde muchos segundos, algo que con el balón hacia delante no necesitó.

Suso | Él es lento, pero el fútbol es más rápido con él

Suso domina un balón ante Bryan Zaragoza.

El gaditano, como él mismo ha comentado en muchas ocasiones, no es un portento físico y rara vez se le verá rompiendo en velocidad, pero, sin embargo, el fútbol sí es infinitamente más rápido cuando el balón pasa por sus pies en las fases de transición. Estuvo clarividente en los pases, incluido el que le dio a Pedrosa, y a balón parado. Dio dos pases de gol, en definitiva.