El Sevilla tuvo un mal día ante el Celta e individualmente la calidad no es suficiente cuando el bloque no funciona. Isaac, que ya en Almería tuvo alguna situación parecida, evitó que quizá el equipo de Quique hubiese sentenciado. El lebrijano ha pasado de ser generoso en ataque a pecar por defecto. Es verdad que siempre se ha dicho que un goleador debe pensar en sí mismo, pero lo mismo que ayuda al equipo con su trabajo y su esfuerzo en la presión, hay veces que hay que mirar cuando el compañero está mejor situado.

Nyland Una buena prada a un tiro de Hugo Álvarez y sin poder hacer nada, o casi nada, en los goles. En el de Cárles Pérez giró tanto el tobillo que lo cogió a contrapié. Grandes golpeos.

Gudelj Notó la inactividad. No es lo mismo unos minutos que jugar de inicio.

Sergio Ramos Cumple a simple vista, pero llegó tres o cuatro veces tarde.

Kike Salas Fue el mejor de los tres centrales, saliendo, entrando duro, tapando (como en la ocasión de Larsen con 1-0)... y acabó en la foto de los dos goles.

Jesús Navas Hugo Álvarez le dio mucho trabajo en defensa, y Bamba le sacó ese centro en las narices. En ataque al menos lo intentó cuando nadie aparecía.

Soumaré Discretito. El rival tenía más ritmo que el Almería.

Óliver Torres Da la cara siempre. Lucha, la pide, aparece por todo el campo... Y, claro, algunas veces se equivoca.

Ocampos Más tapado que otras veces. Jugar por dentro no es lo suyo y apareció menos.

Acuña Enredado. No aportó apenas en ataque y no ayudó en la recuperación de balones. El marrón del 1-1 se lo comió Salas.

Isaac En Almería pecó de egoísmo y enfadó a los compañeros en dos acciones muy seguidas en las que perjudicó al Sevilla. En-Nesyri lo pagó con Quique, pero el enfado era con él.

En-Nesyri No es profesional su reacción tras el cambio. Acertó en la jugada del 1-0, pero esos comportamientos no benefician.

Suso Perdido esta vez.

Lukébakio La tuvo también, pero esta vez no acertó.

Pedrosa Poca participación.

Jordán Así estará Hannibal para que, con 1-2, saliera él...

Lamela Lo intentó sin tino.