Isaac Romero es pura Lebrija. El delantero nervionense, ahora renovado hasta 2028 con una cláusula de 30 millones de euros, sigue llevando, siempre, a su pueblo por bandera. Mantiene sus raíces allí, especialmente con su familia, importantísima y trascendental durante toda su carrera. Ahora, pese a su lesión ante el derbi, el ariete está 'de moda' entre el sevillismo, pero eso no siempre fue así... y únicamente su capacidad para superarse evitó que se quedara por el camino.

El lebrijano ha firmado por cuatro año más con su querido Sevilla, el club que le ha dado la oportunidad de convertirse en futbolista profesional. Sin embargo, Isaac Romero ya se tuvo que marchar de la carretera de Utrera en una ocasión. Fue en benjamines, cuando, tras algo más de una temporada, no logró adaptarse de la mejor forma y acabó fuera de la cantera nervionense. Regresó a su pueblo, a su Antoniano, y rápidamente volvió a eclosionar: en cadetes llegó el Cádiz a por él.

Las imágenes del Sevilla FC - Atlético de Madrid

Decide vestir la elástica amarilla, aunque, después de una temporada, vuelve a ocurrirle lo mismo que le pasó en benjamines: de vuelta al Antoniano. Allí volvió a sentirse futbolista. A ganar 'calle'. Seguramente sea la razón principal por la que, en la actualidad, desarrolla ese tipo de fútbol tan inteligente. Listos, también, fueron en la carretera de Utrera. Sobre todo Cordero Rubio, que le insistió a Marchena para que le diesen otra oportunidad.

Lo hizo y no se arrepintió. Llegó para el Sevilla 'C' y, tras ocho goles y una lesión, debutó con el primer filial y demostró a toda la carretera de Utrera su valía. Esta vez sí: Isaac Romero había vuelto para quedarse.

Las lesiones, otro obstáculo a superar

Sin embargo, la vida no se lo ha puesto sencillo a Isaac Romero. El lebrijano es un chico normal, de familia humilde y trabajadora, que nunca ha tenido la facilidad para conseguir todo mediante 'poner la mano'. Él, desde pequeño, se lo ha ganado todo a base de trabajo. En la carretera de Utrera, aunque volviera con grandes expectativas, tampoco iba a ser sencillo.

En la temporada 2021/22, con el Sevilla Atlético en Primera Federación, Isaac estaba ante su primera gran oportunidad para brillar en el fútbol nacional. La motivación por su parte era máxima, pero el calvario de lesiones le comenzó a avasallar. Comenzó lesionándose del hombro, del cual tuvo que operarse, para, después de recuperarse, romperse el peroné en un entrenamiento bajo las órdenes de Julen Lopetegui.

Isaac Romero tras su primera intervención en el hombro

Se recuperó tras tres meses, pero un nuevo revés le esperaba. Volvió a recaer del hombro y a pasar por el quirófano hasta en dos ocasiones: una durante, aún, la temporada y la segunda en verano, por el anillo inguinal.

Tocó fondo y la lógica decía que, después de una temporada así, su sueño de ser futbolista profesional se iba a acabar. Nada más lejos de la realidad. Isaac Romero Bernal se levantó, volvió a marcar diferencias en el Sevilla Atlético y promocionó al primer equipo para erigirse como el gran artífice de la permanencia en LaLiga EA Sports: seis goles y cuatro asistencias en dieciséis partidos.

Una historia de superación que culmina, por el momento, con una renovación soñada por Isaac. El lebrijano seguirá defendiendo los colores del Sevilla durante, al menos, cuatro temporadas más. Por fin, sellado en papel.