Decepción absoluta para todos los sevillistas tanto en la Champions League como en la temporada europea en general. El equipo de Diego Alonso volvió a perder y acaba con cuatro derrotas y sólo dos puntos en su grupo.

Rakitic | Se cree el Rakitic de hace diez años y ya no tiene velocidad

Rakitic golpea el balón con la izquierda.

El suizo juega como si siguiera siendo el centro de gravedad permanente de este Sevilla y la realidad está muy lejos de ser así. O, al menos, debería no serlo porque lo que consigue es ralentizar permanentemente el juego y que todos los rivales estén colocados cuando la jugada comienza de verdad. Jamás rompe en velocidad, pero él la quiere siempre e incluso se enfadó con En-Nesyri cuando le quitó un disparo. Encima a balón parado, que dicen que es su fuerte, nada de nada.

Sergio Ramos | Tuvo el remate para dejar al Sevilla en Europa

Sergio Ramos transforma el penalti que puso las tablas en el marcador.

Le dieron de nuevo el papel de líder al colocarlo como libre en la defensa de tres y trató de tirar de los suyos. Tuvo el susto de fallar inicialmente el penalti, pero Samba se había adelantado de forma clarísima y, con toda la sangre fría, le lanzó un Panenka. Pero no tuvo la dicha completa porque mandó a las nubes la ocasión más clara en el minuto 94 cuando se le quedó un balón para rematar.

Pedrosa | No fue su mejor noche y la cerró con un error

Pedrosa corre junto con Ruben Aguilar.

Diego Alonso lo colocó como carrilero por la izquierda, pero con toda la banda para él creó menos peligro de lo que provoca cuando ejerce de lateral. Impreciso en los centros, sí tuvo una ocasión clarísima con un remate en un pase de Gudelj que se fue al travesaño de la portería francesa. Cerró su pobre partido con una pérdida tonta ante Sotoca que significó el 2-1 definitivo con todo el equipo atacando.

Soumaré | Notable, corrió riesgos en la salida del balón

Soumaré pelea un balón en el centro del campo con Sotoca.

Volvía el francés a su país y tuvo un partido bastante aseado en la posición de medio centro defensivo para tratar de apoyar a los tres centrales en la salida del balón. Casi siempre lo distribuyó con criterio y lo condujo hasta zonas más avanzadas, pero ahí ya se encontraba tanto él como todo el Sevilla con el inconveniente de la lentitud de Rakitic y también de Óliver Torres.