Lo dejan claro los propios fabricantes. Sepa qué GPS le interesa antes de enfrentarse al vendedor. Para ello, tenemos estos consejos: el primero, disponer de una pantalla táctil a color de gran resolución. Una prestación que permite moverse por los diferentes menús rápidamente y de forma agradable sin necesidad de pulsar botones. Además, debe de ser ultrabrillante para poder ver los mapas con total nitidez, incluso en situaciones de luminosidad intensa. Exija también cartografía actualizada y que ofrezca la máxima cobertura. Una cuestión de crucial importancia a la hora de adquirir un navegador ya que de ella depende que el usuario no se pierda, que encuentre determinadas calles o direcciones de reciente creación o que pueda moverse por autopistas que acaban de inaugurarse. Piense en el uso que le dará, pues el precio de comprar los mapas de la Península Ibérica no difiere mucho si los cambia por los de toda Europa. Solicite también que tenga una gran base de datos de "puntos de interés", como gasolineras, hoteles, etc. Fíjese en que el planificador de rutas sea eficaz, sobre todo si su trabajo depende de ello. Con un buen planificador usted puede establecer de antemano múltiples rutas y grabar un sinfín de destinos asociados a ellas. Incluya también avisos de radares de velocidad (tanto fijos como zonas de radares móviles) y servicios de Tráfico, como el TMC, un servicio de alertas para evitarse atascos. Finalmente, dos aspectos más: Tecnología Bluetooth, para combinarlo con el teléfono móvil, y sistema antirrobo, que bloquea el dispositivo hasta que el usuario introduce una clave determinada o lo lleve a un lugar previamente definido.

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