Algunas organizaciones de trabajadores, estudiantes y padres de la escuela pública abandonaron ayer el pleno del Consejo Escolar del Estado (CEE) como protesta por no admitirse a trámite un informe alternativo del sindicato STES a la reforma educativa, que todas ellas rechazan.

En declaraciones a la prensa, el presidente del Consejo Escolar del Estado (CEE), Francisco López Rupérez, lo calificó de "grave incidente" y argumentó que STES "no se ha sujetado a las normas de respeto" que imponen las reglas del Consejo.

Dejaron la reunión los consejeros de ese sindicato y de CCOO, FETE-UGT, Intersindical Galega y ELA; la Confederación Estatal de Asociaciones de Estudiantes (Canae), el Sindicato de Estudiantes (SE), la Confederación Española de Padres y Madres de Alumnos (Ceapa) y dos de los cuatro de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP).

Estas organizaciones consideraron una "provocación" la actitud del presidente del Consejo, al que acusan de pretender un informe del Consejo "afín" a sus criterios concretamente.

"Hemos abandonado el pleno no para defender el informe de STES, sino simplemente para defender el derecho a la libertad de expresión, cosa que ha cercenado de forma muy grave el presidente", declaró el portavoz de ese sindicato, Augusto Serrano.

Esto fue "la gota que ha colmado el vaso; llevamos un mes sin participar, no se nos tiene en cuenta en nada y, para colmo, hay un ataque a la libertad de expresión", coincidió el secretario general de Enseñanza de CCOO, José Campos, para quien el ministro José Ignacio Wert "recorta en estas libertades".

Y Ceapa anunció una recogida de firmas para "echar atrás" el anteproyecto legislativo.

El pleno del CEE debatió a puerta cerrada el dictamen de la ponencia señalado.