Las denuncias por violencia de género presentadas en el segundo trimestre de este año han aumentado un 17,8% con respecto al mismo periodo de 2020 y también ha subido el número de víctimas (un 20,4%), lo que sitúa los datos de la violencia machista en los niveles previos a la pandemia.

Así lo reflejan los datos del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) publicados ayer y que revelan que durante el segundo trimestre del año se solicitaron 11.098 órdenes de protección, un 9,6% más que hace un año y, de ellas, fueron acordadas 7.969 (un 8,9% más que en 2020).

7.969

El observatorio realiza la comparativa con las cifras del segundo trimestre de 2020, en pleno confinamiento por el inicio de la crisis sanitaria del coronavirus.

En este sentido, la presidenta del observatorio, Ángeles Carmona, destacó que las cifras demuestran que durante los meses más duros de la pandemia no hubo una disminución real de la violencia machista, sino que permaneció oculta a causa del confinamiento y de las dificultades a las que debían enfrentarse las víctimas para escapar del control de los maltratadores y denunciar.

La mayor diferencia con respecto al año pasado se ha dado en el número de sentencias, que se ha triplicado. Los distintos órganos judiciales dictaron 14.794 sentencias entre abril y junio de 2021, un 177% más que en 2020, y la proporción de sentencias condenatorias experimentó un leve descenso, al situarse en el 75,22% del total de dictadas.

Los juzgados de violencia sobre la mujer registraron 40.721 denuncias, un 17,8% más que el año pasado. El porcentaje de denuncias presentadas por las víctimas representa un 73,8% del total, mientras que sigue siendo mínimo el porcentaje de denuncias presentadas por los familiares -no llegan a dos de cada diez- y representan el 1,6% del total.

Entre abril y junio, el número de víctimas ascendió a 40.168 (un 20,4% más que en 2020). De ellas, un 67% eran españolas, mientras que las víctimas menores tuteladas fueron 149.

La tasa de víctimas de la violencia de género se situó en 16,6 por cada 10.000 mujeres, casi tres puntos por encima que hace un año. Por comunidades, la tasa más alta se dio en Baleares, con 25,7 víctimas por cada 10.000 mujeres. También por encima de la media se situaron la Comunidad Valenciana (21,8), Murcia (21,6), Canarias (20,7), Andalucía (19,1) y Madrid (18,2).

Por debajo de la media nacional estuvieron Cantabria (15,7), Castilla-La Mancha (15,1), Cataluña (13,6), Navarra (13,4), Asturias (12,4), País Vasco (12,3), Extremadura y La Rioja (12,1), Aragón (11,9), Galicia (11,7) y Castilla y León (10,2).

Un total de 4.231 víctimas se acogieron a la dispensa de la obligación legal de declarar (un 33,89% más que en 2020).

También aumentaron las órdenes de protección. En total, se solicitaron 11.098, un 9,6% más que en el mismo trimestre del año pasado. La suma de las órdenes de protección acordadas fue de 7.969, un 8,9% más que hace un año. Esa cifra representa el 71,8 % del total de solicitudes.

En el 48,5% de los casos, la víctima mantenía una relación afectiva con el agresor en el momento de solicitar la orden de protección.