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Laura Londoño, ganadora de 'MasterChef Celebrity' en un ajustado duelo final con Escassi

Laura Londoño con el galardón, entre el jurado y el chef Álex Atala

Laura Londoño con el galardón, entre el jurado y el chef Álex Atala / RTVE

Al duelo final de MasterChef Celebrity de este jueves se presentaban quienes cualquier espectador hubiera previsto casi desde el segundo programa de esta edición. Hubiera sido improbable que Laura Londoño no se hubiera presentado con la chaquetilla y la intuición dejaba caer que Álvaro Muñoz Escassi también iba a estar ahí. La colombiana siempre se había mostrado como la más brillante del curso, la que obtuvo el pin de la inmunidad y la que siempre salía airosa de todas las pruebas. Por habilidad y temple. El jinete sevillano se había metido en muchos más líos pero siempre era capaz de resolver con rapidez el reto cuando se sentía acorralado y también su espíritu deportivo le permitió aguantar y remontar. Los deportistas suelen destacar en MasterChef Celebrity por las virtudes que llevan encima tras tantos años de dedicación con disciplina.

Toñi Moreno, pura lágrima, como los guisantes, se quedó en puertas pero en la prueba de exteriores en Cáceres, en Atrio, le pasó de todo.

La sanluqueña no tuvo su día, como tampoco Dani Illescas, aunque sacara adelante todo. Se quedaba suelto Escassi, que aprovechó su clasificación y puso en aprietos a Londoño, que se puso la primera chaquetilla tras vencer en el endiablado postre de nata, fresa y tirabuzones de Jordi Roca. Por supuesto que Toñi fue la primera en perderse en la prueba y el jinete se quedó en puertas debido a que la nata no se le subía, vaya. Así que Londoño, la más detallista y hacendosa, fue la que sorprendió al mismísimo Roca, imaginador y creador de los postres más asombrosos.

En el duelo final, con la presencia del resto de compañeros pero con la ausencia de Genoveva Casanova, La actriz estuvo acompañada de su marido, sus dos hijas pequeñitas y su madre y al sevillano, su pareja, María José Suárez, y los dos hijos de él, sorprendidos aún de las habilidades culinaria paternas. Y junto al jurado un prestigioso chef brasileño y amazónico,  Álex Atala.

Ambos evocaron su niñez, sus recuerdos, para confeccionar sus respectivos menús de lucimiento.

Londoño se inspiró en la primavera colombiana, colorida, en un plato de ensalada con el que ya dejó anonadados al jurado. Escassi desarrollaba un Fondo Marino que tuvo pegas.

El jinete confeccionó un plato principal con rabo de toro en homenaje a su madre, fallecida poco antes de la grabación del programa. Lo elaboró todo emocionado y no hubo ni una pega. La cigala era la protagonista de la propuesta principal de Londoño, en la unión entre Colombia y España.

El postre de cerezas del sevillano iba dedicado a su amor, con la modelo emocionada y el remate de chocolate y fuego de Londoño, llamado Magia interior, le garantizaba la victoria, pero por calidad el duelo estuvo más que reñido.

La victoria de Londoño ha sido en este punto más por la constancia y el conocimiento atesorado en estas semanas. Jesulín de Ubrique, que tanto bregó para poner nerviosa a Londoño, tuvo que admitir para sus adentros, como reconoció el jurado y la audiencia, que la colombiana ha sido la mejor

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