El realityTú al norte y yo al sur, de Canal Sur, no está deparando los esperados brillantes resultados de audiencia. Es lo que tiene enfrentarse a la imbatible La Voz Kids (Telecinco) e incluso a Carlos, Rey Emperador (La 1 de TVE). Pero el auténtico motivo de que el espectador no se esté sintiendo identificado y por tanto no siga este novedoso programa con trasfondo cultural, para Teresa Fernández, una de las expulsadas del concurso, ha sido el cásting. "No salimos del estereotipo andaluz", comenta sobre el resto de participantes, ex compañeros suyos. "En Andalucía hay jóvenes y gente de mediana edad también muy preparados, ya, con una cultura y una formación que no tienen nada que ver con el estereotipo de siempre de andaluz graciosillo. La verdad es que en el País Vasco nos dan cien mil vueltas".

Cierto es que, pese a los discret resultados de share en Andalucía, por debajo de la media de la cadena, en el País Vasco este reality ha resultado un éxito y todo un fenómeno para la cadena ETB, que produce el espacio junto a la autonómica andaluza.

Fernández, una de las primeras concursantes que ha tenido que abandonar la competición, es delegada en Andalucía de una multinacional francesa dedicada a producir energías seguras. A pesar de haber viajado mucho, reconoce que antes de Tú al norte y yo al sur nunca había pisado el País Vasco; es más, confiesa que quizás el estereotipo y el miedo habían pesado demasiado en esta circunstancia. "Había oído decir, como casi todo el mundo, que allí pisas una bolsa y te explota", confiesa. Pero el programa le ha servido para conocer muy de cerca la cultura vasca y a sus gentes y, tras la vivencia, ha quedado encantada. "Ha sido una experiencia maravillosa. Volvería a repetir solamente por volver a conocer a las personas que me llevo como amigas. Mantengo contacto con algunos de ellos, equipo técnico del programa y demás", afirma. Sobre los vascos, manifiesta que ha cambiado completamente el cooncepto que tenía de ellos: "Tienen fama de ser gente muy cerrada, introvertidos... y así es. Aquí en Andalucía somos más extrovertidos, también más mentirosos. En Euskadi son más suyos, pero más sinceros también. Cuando haces un amigo, es para siempre", dice Teresa recordando sus momentos dentro y fuera del espacio de Canal Sur.

Decidió participar en este reality precisamente porque le atraía la idea del choque cultural entre andaluces y vascos. "Escuché el título del programa y que se abría el cásting en la radio", recuerda, "Decidí inscribirme porque me recordó a la película Ocho apellidos vascos y me pareció que sería muy divertido".

En realidad lo ha sido, pese a ser una de las primeras expulsadas del concurso. "Me he ido demasiado pronto precisamente porque cuatro participantes se inventaron una historia sobre mí que no es cierta; por eso me expulsaron tan pronto. Con los otros me llevo estupendamente. Incluso tenemos un grupo de wassap y a una de ellas la vi el pasado fin de semana en Almería", comenta.

Teresa entró a Tú al norte y yo al sur pensando que sólo la grabarían en las pruebas, no durante la convivencia. Por eso opina que intervenir en un reality es "muy duro". "No se puede estar al cien por cien todo el día. No quiero ni pensar qué tiene que ser Gran Hermano, un auténtico estrés, seguro".