Fiestas para dejar los náuticos en casa

Álvaro Góngora y Guillermo Flores cuentan que cuando empezaron a organizar las fiestas OhMyCat -en octubre de 2011-, tenían un lema: "Prohibida la entrada con náuticos". Es toda una declaración de intenciones en una ciudad como Sevilla, donde los porteros de discoteca son bastante estrictos respecto a la vestimenta. Sin embargo, en el tiempo que estos dos jóvenes estudiantes llevan trabajando como promotores de eventos no han cumplido con esa prohibición, ya que, según explican, nunca han segmentado el tipo de público: "Vienes porque te gusta la música, no influyen las pintas que tengas", apunta Flores.

En los más de dos años que llevan celebrándose -con una periodicidad mensual, exceptuando verano y épocas de exámenes- las OhMyCat han pasado por la antigua sala Museo, en la ronda de Capuchinos; la sala Cosmos, en Nervión; y, sobre todo, la sala Malandar. En ese tiempo, pese a que afirman que se han adaptado a las tendencias, su propuesta siempre se ha caracterizado por ser una oferta diferente a lo que había en Sevilla en el momento de su creación: "Teníamos la necesidad de crear algo que no existía. Es una alternativa a las fiestas con música lineal", señala Góngora, estudiante de Ingeniería de Diseño.

Su compañero -que va a acabar este año la carrera de Publicidad- asegura que otro factor importante para la diferenciación que buscan radica en que sus eventos son tematizados: "Hicimos un baile de fin de curso americano; compramos los vasos rojos por internet, servimos ponche e, incluso, elegimos a un rey y a una reina. Siempre desde el cachondeo".

Ninguno de los dos pensó cuando se embarcó en este proyecto que iba a tener la envergadura que ha alcanzado: "Empezamos haciéndolo porque nos gustaba, para nuestros amigos", afirma Álvaro Góngora, que relata que, precisamente por esa razón, el nombre no tiene ninguna historia detrás. "Es más, a ninguno de los dos nos gustan los gatos", dice Flores en tono de broma.

Lo próximo de estos dos sevillanos se llama OhMyCat XXL, y tendrá lugar en la discoteca Betis67 el 22 de marzo. "Es un concepto más amplio, con aforo de 1.000 personas. Vienen dos DJ importantes del panorama nacional como Paul Hard y Gomad! & Monster". Además, Álvaro Góngora y Guillermo Flores han creado la marca OhMyCat DJ, bajo la cual participarán en tres festivales este verano y han pinchado ya en varias ciudades como Madrid y Bilbao. Los dos promotores también han exportado el concepto de sus fiestas, con el trabajo logístico que eso conlleva, a Granada y a Córdoba.

Góngora y Flores también se han embarcado en un proyecto solidario de cara a esta primavera. El 26 de abril se celebrará en el Parque del Alamillo un festival inspirado en la filosofía de OhMyCat -aunque para toda la familia y con otros estilos musicales-, a beneficio de la Asociación de Amistad con el Pueblo Saharaui de Sevilla. "No nos cuesta trabajo hacer algo que nos gusta", afirma Flores, mientras que Góngora asegura que para él significa una satisfacción personal.

Ambos se muestran optimistas respecto a la supervivencia de su creación. "Nos hemos adaptado muy bien a los cambios. A nadie le gusta ir siempre al mismo bar", apunta Guillermo Flores. Su compañero espera seguir adelante con el proyecto, que además considera que le ha permitido aprender un oficio: "No sé si me dedicaré a esto en el futuro, pero yo ya tengo el gusanillo de la producción de eventos".