Salir a comer: Experiencia a la japonesa

1, 2 y 3. La cinta transportadora de sushi ofrece al cliente de Kakure, que se sirve los platos según van pasando, una experiencia al más puro estilo japonés. 4. Tanto los platos como la decoración del restaurante son fieles a la gastronomía tradicional japonesa.

Hace unos días se cumplían dos años desde que Kakure Sushi Bar abrió sus puertas en la calle Marqués de Paradas. En este tiempo, son muchos los que han descubierto los encantos de la gastronomía japonesa y muchos otros los que ya no se conforman con cualquier propuesta. Ser totalmente fiel a las recetas tradicionales de la cocina nipona ha sido y sigue siendo la máxima de este local, regentado por Fernando Valseca y Abel Domínguez, dos jóvenes sevillanos enamorados de esta cultura.

Quizás la pasión que el chef de Kakure, Kosuke Takanezawa, pone en cada plato sea uno de los motivos por los que este sushi bar se ha convertido en un lugar especial. Formado a caballo entre España y su Japón natal, el chef "sigue empapándose de recetas, platos y nuevas tendencias en la cocina cada vez que regresa a su país", explica Fernando. Esto, unido a su gran variedad de platos -además de multitud de tipos de sushi la carta incluye ensaladas, sopas, tempuras, carnes, arroces o ramen (la gran especialidad de la casa)- han convertido a este lugar en visita obligada para los incondicionales de este tipo de cocina.

Los platos -cocinados a través de wok o teppanyaki- se elaboran, explica Fernando Valseca, "sólo a partir de productos traídos directamente de Japón y siguiendo las recetas tradicionales".

Cuando Kakure abrió sus puertas -su nombre rinde homenaje a los Kakure Kirishitan, cristianos japoneses que en el siglo XVII tenían que practicar su religión a escondidas-, no sólo marcó un antes y un después en la oferta gastronómica de la ciudad, que por entonces no prestaba tanta atención a la cocina japonesa. También introdujo un elemento -su cinta transportadora de platos de sushi- que recrea para los clientes la experiencia de un auténtico sushi bar.

Además de a la carta (el precio medio por persona es de unos 15 euros y de unos 12 si se opta por tapear en la cinta transportadora), para los mediodías hay un menú por 14,50 en el que se puede elegir tres platos de entre un total de diez y que incluye bebida.

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