25 años por amor al séptimo arte

No todos los días se consigue una cita con un sevillano portador del título de Caballero de las Artes y las Letras de la República Francesa. Una mención que obtuvo Manuel Gómez Román-Bella (el Bella le fue otorgado tras recibir mencionada distinción) por parte de la Embajada de Francia, a petición de sus servicios culturales, por su entrega, difusión y pasión por el cine y, en concreto, el galo, cuya filmografía casi al completo ha pasado por la pantalla de la Cinemateca en el último cuarto de siglo. El próximo 4 de marzo cumplirá las bodas de plata al frente de un proyecto que se ha convertido en la meca de los cinéfilos más exigentes y en el centro de referencia para visionar aquellas cintas imposibles de encontrar en los cines comerciales. La esencia sigue siendo la misma que la del primer día, las circunstancias no, ya que al cambio de ubicación de la sala se suma el escaso apoyo a este tipo de cine de "autor". Aun así, el director de la Cinemateca lo tiene claro: "Voy a seguir promocionando este sueño que, sin apoyo de instituciones públicas, demuestra que se puede hacer cultura con poco dinero".

Con un listado de más de 6.500 títulos proyectados, la Cinemateca se fraguó en la época dorada de los cineclubes, de donde procedía Manuel Gómez. Licenciado en Ciencias de la Comunicación y por entonces miembro de la asociación Arrebato Filme, no dudó en presentar un proyecto donde el cine filmado por mujeres fuera el protagonista. Finalmente, la sala ubicada en la sede de un sindicato con 400 butacas se presentó como el espacio ideal para un trabajo que se sobredimensionó en poco tiempo.

La primera Muestra Internacional la Mujer y el Cine se llevó a cabo en 1991. Fue tal el éxito que esta iniciativa se extendió y dio lugar a una programación más estable. "Al principio, se exhibían una o dos cintas a la semana para, poco después, continuar con cuatro o cinco", detalla Gómez.

La filosofía de la Cinemateca siempre se ha mantenido. La programación de ciclos de directores o de temáticas, muestras o certámenes han marcado un completo calendario a lo largo de los años que ha permitido ver algunos de los filmes más "imposibles o de autor" así como traer a muchos de los directores más prestigiosos. "Muchos de los hoy reconocidos cineastas estrenaron en la Cinemateca y nos acompañaron".

Cine europeo, del Este, ruso o latinoamericano, "a este último le dimos especial cancha con motivo de la Expo 92", entre otros procedentes de países de todos los continentes, tuvieron y tienen cabida en este espacio cultural que siempre contó con la colaboración de aquellos que trabajaban con Manuel Gómez así como de los cineclubes, filmotecas y cinematecas de diferentes partes del mundo. Para la adquisición de estas cintas, casi todas en 35 mm, el apoyo de instituciones foráneas, que han cubierto las necesidades de la programación al 70% de manera gratuita, fue y sigue siendo fundamental. Los Servicios Culturales de la Embajada de Francia (Instituto Francés, Alianza Francesa, Unfifrance, etcétera), el Goethe Institut (Embajada de Alemania), el Instituto Italiano di Cultura, el Instituto de México (gracias a éste se recuperó la filmografía del Buñuel mexicano), la Casa Árabe, la Casa América y un amplio abanico de colaboradores han hecho posible el disfrute de ciclos tan significativos como los dedicados a Iván Zulueta, Tarkovsky, Joaquín Jordá, Fassbinder, Godard, Bresson, Resnais, Leduc, Dreyer, Bergman, Gutiérrez Alea, y un largo etcétera.

Son muchos los ciclos de la Cinemateca que han marcado la agenda cultural en la ciudad. Así, la Muestra de la Mujer y el Cine se ha convertido en la segunda muestra más longeva de esta temática tras la de Creteil (Francia). Fue el primer espacio que se atrevió a organizar la Muestra de Cine Gay (se celebraron cuatro ediciones con la colaboración de Colega) o una de las pocas salas que se centró en el Cine y Ecología. Destaca también la Muestra de Cine Fantástico, una de sus señas de identidad.

La Cinemateca quiere agradecer el gesto a todas las entidades que han participado en este proyecto con una programación especial por sus bodas de plata. "Rendiremos tributo a lo largo del año por su entusiasta y abnegada colaboración al Instituto Francés a través de la Muestra de Cine Francés". Otros de los clásicos que Gómez pretende recuperar son la Linterna Mágica, el ciclo La Memoria Obstinada, dedicado a películas de directores presentes en estos 25 años, y la Muestra de Cine Fantástico. Un encuentro con cineastas latinoamericanos o un ciclo con filmotecas de España para proyectas sus piezas más exclusivas también espera que formen parte de un programa aún por cerrar.

Tras varias localizaciones, la Cinemateca se encuentra desde 2012 en el salón de actos del IES Martínez Montañés. En este cambio, con el que se encuentra especialmente agradecido a la dirección del centro, ha reducido aforo y días de proyección, "porque, en principio, era una sala provisional". Esperanzado en obtener un espacio más adecuado para una mayor calidad en la exhibición, el director de la Cinemateca reconoce que, aun habiendo proyectado mucho, "necesitaría otros 25 años para proyectar más". Un cuarto de siglo que ha ejercido con mucha pasión y poca retribución económica, lo que le convierte en "un soñador" que ha trabajado "en esta utopía" por verdadero amor al arte.