Un elogio a la chispa del inventor
La Casa de la Ciencia inaugura una exposición sobre los descubrimientos que se realizan gracias a la creatividad
En un panel, una fotografía de un hombre caminando por un bosque con un maletín. No se aprecia de dónde viene, pero tampoco su destino. Detrás, un todoterreno con los faros encendidos sigue al sujeto. Justo al lado, decenas de notas de colores pegadas con distintas versiones de lo que se ve en la imagen anexa. "Si el hombre no se aparta, lo van a atropellar", dice una; mientras que otra asegura que el sujeto es un médico que va a curar a un niño que se ha caído de un árbol. Es el resultado que han conseguido en la Casa de la Ciencia con su nueva exposición, titulada Eureka. Ciencia y creatividad, que se inauguró ayer de forma oficial, aunque lleva abierta desde el 9 de septiembre.
Lo que se pretende con el experimento de la fotografía es demostrar la importancia que tiene la imaginación en la vida cotidiana, pero, al tratarse de un organismo que se dedica a la divulgación, los organizadores hacen especial hincapié en la ciencia. Por ese motivo, muchos de los paneles de la exposición están dedicados a descubrimientos en los que la casualidad tiene gran importancia, como el del Principio de Arquímedes, que se le ocurrió al inventor griego al meterse en una bañera y ver cómo el agua se desbordaba.
Emilio Lora-Tamayo, presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), de quien depende la Casa de la Ciencia, mencionó en su discurso de investigación el concepto serendipia, que se define como un hallazgo afortunado que se descubre cuando se está buscando otra cosa distinta. Para incidir en esa necesidad de trabajo y constancia que requieren los descubrimientos fortuitos, Lora-Tamayo echó mano de las palabras del científico francés Louis Pasteur que dijo que "en el campo de la investigación el azar no favorece más que a los espíritus preparados" e hizo referencia Alexander Fleming, que descubrió la penicilina cuando hacía un cultivo de bacterias.
El acto fue conducido por Miguel Ferrer, delegado institucional del CSIC en Andalucía, y también contó con la presencia de Manuel Torralbo, director general de Universidades de la Junta, y Juan Ignacio Zoido. El alcalde destacó la apuesta que hace el organismo por acercar la ciencia a la ciudad antes de la visita guiada que hicieron las autoridades por el patio central del Pabellón de Perú. De la mano de uno de los trabajadores del equipo de la Casa de la Ciencia, los asistentes a la inauguración pasaron por las cinco áreas en las que se divide la exposición, tituladas Imagina, Innova, Inspírate, Idea e Investiga. Entre los paneles interactivos -muchos de los cuales están pensados para el público infantil-, el visitante podrá conocer cómo muchos objetos cotidianos son fruto de una genial casualidad. Como las notas -post it- del inicio de la muestra, que nacieron por un excedente de pegamento con poco poder adhesivo.
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