Un lugar para amantes de la bicicleta

SEVILLA CYCLING

Por sus venas corre sangre cántabra, por lo que no es extraño que el ciclismo sea para él una forma de vida. En diciembre, Juan Garallar Bedia, un sevillano de 34 años, abría en Marqués de Nervión Sevilla Cycling, un establecimiento dedicado a la cultura de la bicicleta y todo lo que representa.

"La bicicleta forma parte de mi vida desde que tengo uso de razón". Así explica Juan, procedente de una familia natural de Torrelavega (Santander) y llena de ciclistas -algunos conocidos como su tío abuelo Ramón Goiburu-, su pasión por este deporte. Sin embargo, su trayectoria profesional siempre ha estado vinculada a la ingeniería hasta que la crisis lo obligó a reinventarse. "Como toda mi familia siempre he practicado ciclismo pero fue la situación laboral lo que me obligó a emprender mi propio negocio y pensé que era buena idea hacerlo con algo que me encanta". Fue así como se decidió a poner en marcha Sevilla Cycling, que aspira a convertirse en mucho más que en una tienda de bicicletas. "Creo que la mayoría de este tipo de negocios se centran sólo en la bicicleta como objeto, devaluándola y dejando de lado otros aspectos importantes", opina el empresario, que considera necesario "fomentar la convivencia entre peatón y bici y bici y coche" y concienciar al ciclista "de que tiene que cumplir una serie de obligaciones".

Para Juan, "Sevilla, como casi toda Andalucía, es un paraíso a nivel europeo para la práctica del ciclismo" aunque, a su juicio, "aún falta mucho para que se extienda su uso más allá del carril bici". Por eso, apoyar a jóvenes deportistas es uno de los objetivos que se ha propuesto a largo plazo.

En Sevilla Cycling hay modelos para los que usan la bicicleta como medio de transporte -merece la pena echar un vistazo a las de piñón fijo o fixie, con marcas como Pepita o Polo & Bike - y también para los que quieren practicar deporte -con BH, Mountain Bike y diferentes marcas nacionales como referentes-. También tienen bicicletas especiales para carretera y cuadros (Columbus o BH) para montajes. Además, el establecimiento dispone de todos los complementos -productos de nutrición, ropa, protección e incluso libros ... - necesarios para practicar el ciclismo. Por último, además de todo tipo de reparaciones - "como en los talleres de barrio de toda la vida"-, Juan restaura por completo las bicicletas antiguas que les llevan sus clientes.