TRANSPORTE PÚBLICO
Los horarios de Tussam para Nochevieja y Año Nuevo

Una sede más para el arte jondo de Triana

Flamenquería abre sus puertas en la calle Castilla como un espacio multidisciplinar dedicado al cante, al toque y al baile

Laura Segovia, entre las sillas de la sala que se utiliza como tablao, pero tambien como zona de ensayos.
Carlos Rocha

06 de octubre 2014 - 01:00

La columna vertebral de Flamenquería es un largo pasillo que hace las veces de sala de exposiciones y que en la pared tiene colgadas pinturas de Paco de Lucía y Camarón de la Isla. Al principio del espacio, detrás de la zona donde trabaja la recepcionista, hay una tienda con batas de cola, trajes de flamenca y coloridos zapatos de tacón. En las dos salas que se disponen a lo largo del corredor, los espejos esperan a los alumnos que quieran aprender a tocar la guitarra, a cantar por bulerías o a bailar sevillanas. Pero es el espacio que se encuentra al final del pasillo el que más llama la atención a quien visita Flamenquería. Una cristalera con vistas al Paseo de la O y al río Guadalquivir es el mejor fondo para un espacio que puede ser sala de ensayos, pero que, si se despliega el escenario abatible y se colocan las sillas de enea, se convierte en un tablao para albergar espectáculos flamencos. Todo eso es Flamenquería, un espacio multidisciplinar dedicado al flamenco, que se inauguró, oficialmente, el primer día de octubre.

Detrás de este proyecto está la bailaora castellana Laura Segovia. Original de la ciudad de la que tomó su apellido, se formó en Madrid y vivió dos años en Sevilla -precisamente en Triana-, pero para poder convertirse en directora del local, situado en el número 94 de la calle Castilla, tuvo que pasar antes por la capital rusa. "Flamenquería abrió hace tres años en Moscú, con el apoyo de Javier García-Larrache, consejero de Cultura de la Embajada de España. Allí hay un edificio enorme dedicado al flamenco donde trabajé cinco años", cuenta Segovia.

Fue en la ciudad de los zares donde surgió la idea de establecer una sede en Triana. "El proceso ha sido largo. Hace dos años empezamos a mirar locales y las obras han durado cerca de año y medio", apunta la joven, que se muestra orgullosa del resultado y del éxito de la doble inauguración. Y es que Flamenquería tuvo una puesta de largo a la que acudieron grandes figuras del flamenco, como Cristina Hoyos, Antonio Canales y Manuela Carrasco, así como Lucía Bosé, amiga personal de Laura Segovia y madrina de una de las salas. Además, al día siguiente, el espacio celebró una jornada de puertas abiertas con clases gratuitas de las diferentes disciplinas del arte jondo que tiene en su oferta.

El local trianero alberga actividades desde la pasada primavera, pero será a lo largo del mes de octubre cuando la programación tome fuerza. La escuela ofrecerá clases de toque, cante y baile organizadas en cursos generales e intensivos para niveles que van desde iniciación a profesional, impartidos por un equipo de unos quince profesores procedentes de toda la península. En el apartado de exposiciones, el objetivo de Segovia es convertirse en sede de muestras fotográficas y de pintura; mientras que la programación de espectáculos comenzará con cinco sesiones semanales: una los jueves para jóvenes promesas y dos los viernes y sábados, a las 19:00 y a las 21:00. Sin embargo, Laura Segovia asegura que su intención es adaptarse a las peticiones del público siempre que le sea posible.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último