Entre la tradición y el brillo

La vigésimo cuarta edición de la Carrera Nocturna del Guadalquivir llega como una bendición para todos los amantes del atletismo, dispuestos a participar un año más en una cita convertida ya en tradición por sus excelentes focos de atención y un recorrido que maravilla a todos los corredores populares.

Además, la Nocturna del Guadalquivir de esta edición colabora con la Asociación Española contra el Cáncer a través de donativos que se han ido gestionando en el Estadio de la Cartuja.

Pero la cita volverá a ser un escaparate importante a nivel deportivo, repitiendo el espectáculo de las últimas ediciones. Nombres ilustres como el triatleta sevillano José María Merchán o Antonio David Jiménez Pentinel, doble campeón de la carrera, mejorarán aún más el cartel de una prueba en la que correrán más de 12.000 atletas.

La esencia de la Nocturna del Guadalquivir se basa en su circuito urbano lleno de colorido en la noche sevillana, en el entorno de la Isla de la Cartuja y con un final en el propio Estadio Olímpico, en el que espera un público deseoso de recibir a los primeros clasificados y a su vez a todos los que compiten por el simple deseo de reinar por un día en la ciudad.

Pocas sorpresas suele deparar la cita hispalense en relación a los ganadores, nombres que suelen dominar a nivel nacional las carreras de media distancia. Los 11.300 metros de la prueba obligan a una condición física envidiable para luchar por un triunfo que da prestigio por el buen cartel que acumula desde los últimos años. Y será también la cita de la solidaridad, en una nueva muestra de que va unida al deporte desde sus base. La posible lluvia es, hasta el momento, la única preocupación existente.