Kostas Vasileiadis está de enhorabuena. Recibió la grata noticia en la festividad de San Juan, hace dos días, de que el lituano Jonas Kazlauskas lo había integrado en la nómina de la preselección griega de 17 jugadores para el Mundial de Turquía, a falta aún de que descarte a cinco para la cita. Además, el alero heleno, que ha militado la última campaña en el Obradoiro siendo la principal referencia del perímetro del equipo gallego, también está de enhorabuena al comprobar que no le faltan ofertas para enrolarse en algún club importante la próxima temporada; de hecho, el ex jugador de Unicaja ha recibido una jugosa oferta para venir a Sevilla el curso venidero.

Juan Llaneza, director deportivo cajista, no puede esperar más a Tariq Kirksay y ya se comienza a mover en el zoco estival para tratar de cerrar la incorporación de un alero alto que pueda reforzar la plantilla de Joan Plaza en el caso de que el francés dé largas a los sevillanos y no acepte la propuesta por dos años que maneja su representante desde hace semanas.

En el Cajasol no tienen noticias desde hace días sobre la decisión que tomará el jugador de origen estadounidense, que sabe que Plaza desea por todos los medios contar con él en el proyecto y está tensando la cuerda para que el Cajasol suba las cifras. En éstas, aparece la posibilidad de firmar a Vasileiadis y en San Pablo no se lo están pensando, sino que han trasladado al apoderado griego del alero un propuesta que puede ser aceptada en breve.

Kirksay y Vasileiadis, aparte de la similar estatura, poco tienen que ver el uno con el otro. Mientras el primero es un jugador más de corte defensivo y que mira más por el trabajo colectivo, el segundo se caracteriza más por su buen tono ofensivo, perdiendo fuelle en defensa. Ambos, eso sí, viven el juego con pasión y trasladan su forma der a la grada.

Con 26 años y 2,00 metros clavados de altura, Vasileiadis se perdió nueve partidos de la fase regular con el equipo santiagués la pasada temporada -sólo uno en la primera vuelta, cuando los gallegos sumaron siete triunfos antes del descalabro de la segunda-, pero en los otros 25 rayó a gran altura, promediando 30 minutos de juego, 16 puntos, 4 rebotes, 2 asistencias y 17 de valoración, con un excelente porcentaje en tiros libres (90%) y más que aceptable en triples (37%).

Aunque la prioridad de todos, sobre todo de Joan Plaza, es que Kirksay rebaje sus pretensiones y termine cerrando su renovación por dos temporadas con el Cajasol, en el club no van a esperar mucho más y Vasileiadis aparece como una de las principales alternativas a convertirse en el alero alto del equipo para la próxima temporada. Además, su baja ficha en el ya descendido Obradoiro en la campaña recién concluida propicia que su caché, aun mejorándolo notablemente, no se dispare.