Miles de poemas, docenas de cuentos, novelas, ensayos y diarios, junto con una voluminosa correspondencia (más de 5.000 cartas) mantenida con Jorge Luis Borges, los hermanos Machado o Ramón Gómez de la Serna. Todos estos documentos forman parte del valioso archivo que legó Rafael Cansinos Assens a sus herederos, el mismo que estará por fin en Sevilla a finales de 2011. Así lo confirmó ayer a este periódico Rafael Cansinos, hijo y heredero universal del escritor, traductor y promotor del ultraísmo, amén de impulsor de la fundación que albergará el Convento de Santa Clara y que ayer quedó constituida ante notario.

La nueva entidad, de la que el Ayuntamiento es patrono desde el pasado mes de febrero, comenzará sus actividades "antes de verano" o "inmediatamente después" [del verano], explicó Cansinos después de visitar al alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, para informarle de sus últimas gestiones. El gobierno municipal ha comprometido 60.000 euros para impulsar la creación de la fundación este año, y 90.000 a partir del siguiente como "asignación anual fija".

La llamada casa del sacristán del antiguo convento del barrio de San Lorenzo será el hogar definitivo de "uno de los principales archivos literarios del primer tercio del siglo XX", pero, mientras se terminan las obras de la segunda fase de la remodelación del complejo, Cansinos hijo trabajará desde el próximo mes de abril en un despacho provisional en la entrada de Santa Clara.

Allí, el heredero del escritor nacido en Sevilla tendrá abundante trabajo. Por un lado, en respuesta a su intención de no depender exclusivamente de los recursos públicos (aspira a que no más del 25% de los fondos proceda de la administración), Cansinos buscará socios de otros ámbitos. Según explicó ayer, Cajasol es una de las entidades a las que se dirigirá para obtener su apoyo, aunque de momento no ha habido contactos. Sí los ha tenido en cambio con el Ayuntamiento de Madrid, donde el autor de La novela de un literato pasó la mayor parte de su vida. La idea es organizar en la capital española una exposición con motivo del 75 aniversario de la Guerra Civil, entre 2001 y 2014, sobre la que Cansinos escribió en sus Diarios, unas memorias que escribió en inglés, alemán, francés y árabe para practicar tales idiomas.

También solicitará financiación al Ministerio de Cultura para la digitalización de los fondos, un proceso "costoso", dice el heredero, y que requerirá la participacición de numerosos especialistas. Una vez que todo el material esté catalogado, y ya con el archivo físicamente en Andalucía (condición indispensable), Rafael Cansinos iniciará los trámites para que sea declarado por la Junta Bien de Interés Cultural, una condición que le negó el Gobierno autonómico madrileño y que en cierto modo desencadenó la decisión de trasladar este patrimonio documental a Sevilla.

Asimismo, el próximo otoño, de momento sin fecha más concreta que ésta, se celebrará un ciclo de conferencias acerca de Cansinos Assens, una de las voces más singulares de la literatura española de vanguardia e icono de la bohemia de posguerra. Las ponencias correrán a cargo del escritor y crítico de arte Juan Manuel Bonet -presidente además de la recién creada fundación-, Jacobo Israel Garzón, Marcos Ricardo Barnatán, el profesor sevillano Alberto González Troyano, Isabel Tuda y el propio Cansinos hijo, todos ellos patronos de la fundación junto al Ayuntamiento.