"El personal de Enfermería está al límite, si se producen más recortes en las plantillas del SAS, servicios hospitalarios y centros de salud están abocados al cierre porque no podrían seguir funcionando". La secretaria provincial de sindicato de Enfermería-Satse, Reyes Zabala, advirtió con esta contundencia la difícil situación que ya atraviesa la sanidad en Sevilla, tras dos años de reajustes en las plantillas sanitarias. En el resto de Andalucía, la situación es similar, si bien "Sevilla es la provincia que especialmente acumula más afectación", apuntó Francisco Muñoz, secretario general de Satse-Andalucía.

Los últimos recortes se han producido este mismo mes de mayo con la pérdida de 21 enfermeras en los centros de salud de la ciudad que pertenecen a la denominada plantilla colchón, encargada de sustituir ausencias motivadas por permisos, bajas o vacaciones. Zabala recordó que durante los últimos años los trabajadores y el Satse han reivindicado, sin éxito, una adecuación de las plantillas ante al aumento de pacientes y de los programas sanitarios. "En la provincia hay 138 puestos estructurales que son ocupados por enfermeras de manera eventual; si estas profesionales no renuevan sus contratos, se tendrán que cerrar servicios", insistió. Ante esta situación y contra los nuevos recortes anunciados, el Satse ha preparado un mes de movilizaciones en las que pedirán la participación de los ciudadanos para frenar el deterioro de un Sistema Nacional de Salud modélico, hasta ahora.

Las medidas del Gobierno "sólo llevarán al cierre de más camas, a la pérdida de profesionales, al aumento de las listas de espera y de las demoras en la asistencia, a la privatización y a una pérdida en la seguridad del paciente", alertó el secretario andaluz del Satse. "Pediremos al Gobierno que permita a las comunidades autónomas recortar de otras áreas distintas a la sanidad, que no puede perder ni un euro más", añadió Zabala.

Además de la pérdida de trabajadores, los enfermeros también soportan la precariedad de los contratos, ya que si hasta ahora renovaban en el SAS por cada seis meses, en estos momentos los contratos son de un mes o de dos, en la inmensa mayoría de los casos, con el temor sobre su continuidad.

Los centros de salud cuentan con las plantillas justas en la ciudad, pero en otros distritos sanitarios como es el Aljarafe, las enfermeras están sometidas a una sobrecarga de la presión asistencial, con una ratio de 2.200 pacientes, cuando lo recomendable es que cada profesional asuma a unas 1.500 personas. Frente al recorte de personal, el Satse ha planteado a las Administraciones otras medidas para el ahorro: la reducción de cargos intermedios y directivos, el aumento de la atención a domicilio o una gestión racional de las listas de espera.