Sevilla

La ampliación de la zona azul desplaza a los 'gorrillas' a Nervión

  • Los vecinos de este barrio elevan un informe al Ayuntamiento en el que detallan el incremento de aparcacoches, el cambio de perfil de los mismos y la inutilidad de las multas.

La ampliación de la zona azul en barrios como Bami o la Calzada no ha servido para eliminar a los numerosos gorrillas que frecuentaban estas calles. Más bien el efecto ha sido el de desplazarlos hacia otros puntos de la ciudad, como el barrio de Nervión. Así consta en un informe elaborado por los vecinos de esta zona, que fue presentado en el registro municipal el pasado viernes. En este documento, firmado por varias comunidades de propietarios de Nervión, los vecinos alertan del incremento de aparcacoches ilegales y del cambio de perfil de los mismos en los últimos meses.

"La implantación de la zona azul en determinadas vías próximas a instalaciones deportivas y comerciales de Nervión no hace que este problema se aleje de la zona, puesto que queda clara la presencia de los gorrillas a determinadas horas del día. Por ello, se entiende que la implantación de la zona azul sólo está sirviendo para desplazarlos de un lugar a otro", apunta el informe.

Los vecinos también creen que las multas impuestas a los aparcacoches por parte de la Policía Local no sirven para nada. "Las multas no sólo no han logrado retirar a los gorrillas, sino que la impresión general que se obtiene de un simple paseo por las calles es la de que han aumentado en número", apuntan los residentes, que añaden que la presencia de aparcacoches en calles como Mariano Benlliure era antes esporádica y coincidiendo con los días de partido del Sevilla en casa. Ahora ya pueden verse con frecuencia.

El informe vecinal añade que la mayoría de los aparcacoches eran antes drogadictos, que ahora son minoría. "Antaño la mayoría eran toxicómanos, que amenazaban a los conductores que no les pagaban con causarle daños al coche. Ahora quedan menos y en muchas zonas han sido sustituidos por extranjeros", apuntan los residentes. "Una de las zonas más afectadas por el problema son las vías que colindan con los grandes centros comerciales y el estadio Ramón Sánchez Pizjuán, donde la concentración de gorrillas sigue siendo muy elevada. Los vecinos de esta zona llevan años padeciendo esta situación, con enfrentamientos entre ellos y con la insalubridad que generan los aparcacoches", añade el documento, que va dirigido al delegado de Movilidad y Seguridad del Ayuntamiento de Sevilla, Juan Bueno.

Los vecinos creen que Nervión se está convirtiendo en el nuevo Bami y que en calles como Eduardo Dato, José Luis de Casso, Manuel Casana o Ventura de la Vega se viven situaciones idénticas a las que hubo -y todavía hay cuando no está vigente la zona azul- en Bami, con peleas entre los aparcacoches por hacerse con un hueco para señalar el aparcamiento. Conscientes de la inutilidad del sistema de multas de la Policía Local, los vecinos creen que es necesaria una mayor presencia de los agentes de este cuerpo para que al menos realicen una labor disuasoria que mantenga las calles sin gorrillas durante algunas horas.

El informe apunta también que se ha incrementado el número de robos en la zona y que en alguna ocasión los vecinos han sorprendido a algún gorrilla portando objetos de dudosa procedencia. Esta mercancía es revendida en plena calle en las inmediaciones del centro comercial Nervión Plaza, exponen los vecinos. Es habitual también, añaden, que al final de la jornada muchos se desplacen hacia el distrito Cerro-Amate.

"El tránsito de estos señores por determinadas vías del barrio de Nervión ya es un tema en boca de muchos vecinos, puesto que genera momentos de determinada inseguridad e intranquilidad, sobre todo después de que en algún caso hayan sido sorprendidos apoderándose de lo ajeno", exponen los residentes, que concluyen el informe alertando de la urgencia de "tomar conciencia de la verdadera necesidad de erradicar definitivamente esta práctica ilegal".

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