Los Hospitales Virgen del Rocío, Macarena y Valme tienen previsto cerrar 662 camas en agosto, según datos facilitados por el sindicato de Enfermería Satse, que recuerda que cada verano suelen registrarse problemas de saturación en las Urgencias debido, entre otras causas, a la falta de recursos en las plantas de hospitalización. Cada periodo vacacional el SAS cierra camas y disminuye la actividad quirúrgica programada.

"El Valme, que tiene una población de referencia muy amplia, cerrará un número excesivo de camas: 74 en el hospital central y otras 37 en el Tomillar, que puede generar problemas en el centro", advierte Reyes Zabala, portavoz del Sindicato de Enfermería Satse, quien recuerda que este hospital tiene "el peor ratio enfemera/pacientes, con una enfermera por cada 17 pacientes en áreas sensibles como Medicina Interna frente a la ratio de una enfermera por 13 pacientes que existe, por ejemplo, en el Macarena". En Urgencias, el área de Observación tiene una ratio de una enfermera para diez enfermos, cuando la ratio máxima idónea debe de ser de una profesional para siete pacientes.

Los delegados sindicales del Satse han comprobado que el cierre de camas es superior al establecido en el plan de vacaciones presentado por el SAS. Por ejemplo, el pasado miércoles cerraron en el Valme tres camas de la UCI que de nuevo se abrieron por la tarde por razones de necesidad, y que previsiblemente volverán a cerrarse. Y en el Macarena se han cerrado doce camas de Pediatría, una medida que tampoco consta en el plan de vacaciones del SAS.

El Hospital Macarena cerrará, en principio, 197 camas a partir del 15 de julio y hasta finales de agosto; lo que supone el 21% de los puestos asistenciales. La actividad quirúrgica también disminuirá si bien en la segunda quincena de julio se espera que continúen funcionando 17 quirófanos por la mañana y cuatro por la tarde, de las 19 salas quirúrgicas de las que dispone el centro. En agosto funcionarán 12 por la mañana y uno por la tarde.

"En la segunda quincena de julio se produce un desfase, ya que sólo dejarán de funcionar dos quirófanos por las mañanas mientras que el cierre de camas será muy alto, casi doscientas", añade la portavoz sindical.

El Hospital Virgen del Rocío, que cuenta con 1.292 camas funcionando, cerrará el 23% de la mismas, lo que en número absolutos se traduce en 354 camas. En cuanto a los quirófanos funcionarán 20 salas de las 47 con las que dispone el complejo repartidas entre el Hospital General, Traumatología, Hospital Infantil y Maternal.