No hay duda de que Sevilla es una ciudad con gran cantidad de perros, la mascota preferida por los sevillanos y andaluces, especialmente por los hombres (66%) en una proporción mayor que de mujeres (33%), ya que ellas prefieren gatos mucho más que ellos. Pero lo que no sabíamos es que la población de canes casi alcanza la cifra de 450.000 en toda la provincia (exactamente 448.233), según los datos del Registro Andaluz de Identificación de Animal (www.raia.es) que gestiona el Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Veterinarios, por encomienda de la Consejería de Justicia e Interior de la Junta.

Así pues, de estos números se desprende que en la provincia de Sevilla hay un perro por cada cuatro habitantes, un dato que resulta de calcular la proporción respecto a los 1.940.806 vecinos que tiene la población de la provincia, a fecha de 1 de enero de 2016.

El número de estos animales de compañía es muy alto en Sevilla, aunque la realidad es que Málaga es la provincia andaluza que lidera este ranking, con sus 465.605 perros. En cualquier caso, son números tan elevados en ambas provincias que, si los comparamos con los habitantes, se acercan a la población de la capital de Málaga.

Con estas cantidades no es de extrañar que las autoridades de muchas ciudades hayan planificado actuaciones para garantizar que los dueños de los perros cumplan con sus obligaciones sanitarias dentro y fuera de los hogares. En la calle las obligaciones pasan por que estos animales no hagan sus necesidades en la vía pública.

En Sevilla capital, sin ir más lejos, el Ayuntamiento aprobó a finales de 2015 crear un banco de ADN de perros para responsabilizar a los dueños que dejan en la calle los excrementos de sus animales. La propuesta partió del grupo municipal de Ciudadanos y contó con la aprobación unánime de los demás grupos. Hasta ahora no hemos tenido noticia de los preparativos para hacer realidad este banco, pese a que la presencia de excrementos en parques y aceras es de las cosas más desagradables que sufren los vecinos.

En la capital es un problema extendido históricamente en casi todos los barrios e incluso causa una sorpresa muy negativa entre buena parte de los extranjeros que visitan la ciudad. Los carteles que recuerdan la obligación de los dueños sigue sin ser respetado por demasiadas personas, lo cual es un indicador claro de incivismo.

Dentro de la población de perros, las cuatro razas más corrientes son cruzado, podenco, yorkshire terrier y galgo español. Y si hablamos de perros peligrosos, Sevilla, con 834, es la provincia con menos afición a estos animales, al menos según el registro oficial. Málaga se lleva la palma con 12.847, seguida de Cádiz, con 6.553. Los datos pueden verse en la infografía adjunta.

Pero hay más mascotas en los hogares sevillanos y andaluces: gatos, hurones, aves tropicales (psitaciformes), pequeñísimos cerditos (minipig) y otras especies. El gato es el segundo animal preferido y, en la actualidad, la población de felinos se sitúa en 23.529, muy lejos de la avalancha de perros. La pasión por los gatos se observa claramente en la provincia de Málaga, con 49.772, que lidera el ranking por delante de la provincia de Sevilla.

Sobre los hurones, están censados en Sevilla 2.570, una cifra que coloca a la provincia en el lugar con más animales de compañía de este tipo. Le sigue Córdoba (2.458) y Málaga (2.346).

El registro de identificación animal es una obligación de los propietarios de mascotas para establecer programas sanitarios preventivos o de urgencia ante enfermedades transmisibles, para su recuperación en caso de pérdida o robo, o para intervención por maltrato. Lo obliga la Ley 11/2003 de Protección de los Animales en su artículo 17.1 que reza que "perros y gatos deberán ser identificados individualmente mediante sistema de identificación electrónica normalizado, implantado por veterinario, dentro del plazo máximo de tres meses desde su nacimiento".