Dos agentes de la Policía Local de Sevilla recibieron el pasado sábado una paliza cuando se hallaban de servicio en el mercadillo de Torreblanca y fueron agredidos con numerosos golpes y patadas por parte de un grupo de vendedores cuando se disponían a denunciar a uno de ellos. Los agentes tuvieron que defenderse solos ante un grupo que les superaba ampliamente en número y no pudieron pedir refuerzos porque el sistema de transmisiones no tiene cobertura en el barrio de Torreblanca, según confirmaron a este periódico fuentes policiales.

El altercado, por el que ambos agentes tuvieron que recibir asistencia sanitaria y actualmente se encuentran de baja en sus domicilios, tuvo lugar a primera hora de la mañana del pasado sábado, en torno a las 10:00, cuando los dos policías se encontraban de servicio en la calle Torremegía de la barriada de Torreblanca, con motivo del mercadillo de venta ambulante que se instala en la zona. En ese momento, los agentes iniciaron las gestiones para identificar a uno de los vendedores, al objeto de presentar una denuncia contra esta persona. El vendedor reaccionó agrediendo a los agentes, acompañado por otros conocidos suyos y de otras personas que se hallaban en la vía pública.

Los dos policías intentaron comunicarse con la central a través de sus equipos de transmisiones, pero los walkis no funcionaban porque en esta zona de la ciudad no hay cobertura al no disponer de antenas repetidoras de señal. En su desesperación y ante la agresión que no cesaba, los agentes tuvieron que apartarse del lugar del suceso y pedir ayuda a los comerciantes para que alertasen al centro de emergencias del 112 y desde aquí se avisara a la Policía de lo que estaba sucediendo.

Después de varios minutos un oficial de la Policía Local escuchó por fin el código de alerta que indica que un agente está en peligro, lo que permitió que se desplazaran a la zona un grupo de agentes de la Policía Local y varias unidades de la Policía Nacional. Los dos agentes tuvieron que ser asistidos de las lesiones que presentaban e incluso uno de ellos llevaba marcada en su cuerpo la suela de las zapatillas de uno de los agresores, lo que da una muestra de la agresión que sufrieron, según explicaron fuentes policiales. De haber funcionado los equipos de radio, los refuerzos policiales podrían haber llegado en cuestión de unos tres minutos frente a los cerca de diez minutos en los que se desarrollaron los hechos en los que se produjo la agresión.

La falta de cobertura del nuevo sistema de transmisiones de la Policía Local -se ha pasado de un modelo analógico a otro digital- en la zona de Torreblanca es conocida por el Ayuntamiento. La semana pasada incluso tuvo que suspenderse una operación conjunta con la Policía Nacional porque, según dijeron las mismas fuentes, no podía garantizarse la integridad física y la seguridad de los policías en este lugar, ante la falta de cobertura de los equipos transmisores que los deja sin utilidad alguna.

Los equipos policiales que se desplazaron a Torreblanca tras el incidente realizaron una batida por la zona para tratar de localizar a los agresores, pero las pesquisas resultaron infructuosas.