No es nada nuevo. En los últimos años es habitual que José María del Nido tenga que exponer la confianza del club en el proyecto y en el entrenador cuando o los resultados o el juego no se adecuan a los gustos de un sector de la afición. El presidente lo hizo en el marco de la presentación de un acuerdo con La Caixa en el que sacó las uñas por Marcelino hasta recordando que a Juande Ramos, la omnipresente referencia, se le escapó una Liga en Palma de Mallorca.

"Estamos satisfechos con el trabajo que está desarrollando el entrenador. El equipo ha tenido momentos buenos en Villarreal, con el Málaga y en Pamplona. Lo que hay que hacer es buscar la estabilidad de esos momentos buenos. Marcelino lleva poco tiempo, pero estoy convencido de que esa buena imagen será más constante", recordó el máximo dirigente sevillista, que tuvo que explicar por qué Antonio Álvarez estaba casi sentenciado hace un año con parecidos números: "Son circunstancias y momentos diferentes. Se creyó entonces que había llegado el fin y Marcelino va a tener toda la temporada".

Y otra vez la comparación con Juande y con el fútbol de aquel Sevilla. "No me fijo en esa meta. Quiero que Marcelino implante en nuestro equipo su estilo. Juande tenía unos jugadores que no tiene Marcelino, con lo cual es imposible volver a jugar aquel fútbol, el fútbol bueno de ganarle al Madrid y el fútbol malo de perder en Tarragona y de perder la Liga en Mallorca".

Del Nido no es que pida paciencia sino que repite para quien quiera oírlo que el Sevilla la va a tener con el entrenador asturiano. "Mi experiencia me indica que cuando hay un cambio de ciclo tan radical en el que han salido más de una docena de jugadores y se cambia el sistema de trabajo, hay que dar el tiempo que a veces el fútbol no permite. En este caso, el equipo ha dado muestras de ser mejor del de la pasada campaña", subrayó.

Cambiando de tema, el presidente, como no podía ser de otra forma, se tenía que referir a la Liga y a la desigualdad que esta semana parece rota con los empates de Madrid y Barça y la reciente derrota del primero ante el Levante, ahora sexto. "Yo compelo a que esta pregunta me la hagan en mayo. Entonces tendremos un dato objetivo para decir si el Levante jugará la Europa League o si Barcelona y el Madrid, por el orden en que están ahora, le sacan 20 ó 30 puntos al tercero", contestó y siguió en lo concerniente a los derechos televisivos: "La batalla está en pleno auge y estoy convencido de que tendremos reuniones muy pronto y cada vez más de que las opciones para llegar a un entente satisfactorio, que es un mejor reparto, no van a ser del cien por cien, pero sí del ochenta por ciento".

El líder de los clubes que piden un cambio ofreció otra frase para enmarcar sobre nuestra Liga. "El problema sólo tiene una solución, que es que como todos lo generamos, entre todos decidamos cómo lo repartimos. Me decía ahora el delegado territorial de La Caixa que los mercados están a la baja y decía que porque somos un país de pandereta... bueno pues somos un país de pandereta, bandurria y castañuelas en el mundo del fútbol porque somos el único del mundo que reparte los derechos todo para dos y nada para el resto".