El peso específico de Frederic Kanoute en este Sevilla es enorme, y más si, como parece que va a suceder este domingo en el Vicente Calderón, Negredo causa baja. El dorsal 12 no tiene nada que demostrar a nadie, pero sí a sí mismo. Por eso ha dado el paso adelante en la asunción de su rol de líder esta temporada en que Palop juega menos, y por eso ha dado también ese paso adelante sobre la hierba, pues eso es justo lo que Marcelino quiere de él, que explote su mayúscula capacidad de definición ante la portería rival. Y en ello está: dos goles valiosísimos ante la Real Sociedad (1-0) y el Valencia (1-0) que han supuesto cuatro puntos.

El largo y fructífero vínculo de Kanoute con el club de Nervión pudo acabar en junio, pero el sevillismo recibió la buena nueva de que agotaría su año de contrato: "En el plano personal estoy bastante satisfecho. El míster me utiliza como creo que hace falta al equipo, sigo con un ritmo y un nivel satisfactorio. Espero mejorar, claro está, no voy a caer en la autocomplacencia, a nivel deportivo eso es una trampa y no me voy a conformar con lo que hago ahora. Voy a mejorar yo y vamos a mejorar como equipo", comentó a Diario de Sevilla.

El año pasado era habitual ver a Kanoute cerca del círculo central, apoyando mucho en las labores de distribución y creación. Pero esta temporada no está sufriendo el hándicap de jugar tan lejos de la portería contraria: "El entrenador me dijo que me quiere más en punta porque quiere aprovechar mi remate a gol. Yo trato de participar en el juego y cuando estoy bien físicamente es la mejor manera de utilizarme, pero siempre llegando arriba, lo que él quiere es que esté arriba para terminar las jugadas, él no quiere que me retrase para tocar y luego no llegue al área".

El franco-malí se congratula de que su equipo presione cada vez más arriba, que busque la pelota cada vez más lejos de Javi Varas o Palop. Eso redunda en un mayor rendimiento individual en la zona de remate: "Si todo el grupo está más adelante incluso sin la pelota y apretamos más arriba, después van a conectar más arriba conmigo y es más fácil para todo el mundo, porque llegamos a portería con más frescura que si tuviéramos que atravesar todo el campo".

Ante el Valencia, en la primera parte, ya se vio que el Sevilla se acercó más a lo que pretende Marcelino. Y es que cosechar puntos es la mejor forma de que un proyecto cuaje: "Para encontrarnos a inicios de temporada, no está mal lo que estamos haciendo. Hay que estar por ahora más satisfechos de los resultados que del juego, pero las victorias son el punto de partida para creer en lo que estás haciendo. Después, con el tiempo, si podemos ganar con más facilidad, tanto mejor. Pero de momento, lo importante es la seriedad del equipo para ir ganando puntos. Me quedo con esto. Desde esa seriedad atrás estamos construyendo algo interesante, y espero que con el tiempo, ofensivamente vamos a tener más fluidez".

Kanoute recuerda que esa creciente solidez defensiva radica en el trabajo de todos: "Desde la perspectiva defensiva, trabajamos también delante. Cuando perdemos el balón, nos posicionamos de tal manera que el contrario no pueda hacernos daño. Hay trabajo específico para defensas, pero todos tienen que estar atentos a lo que tienen que hacer, y por ahora funciona".

Va más allá: "Sólo hemos recibido tres goles y de ellos sólo uno de jugada, eso da confianza. Eso también va generando dudas en los contrarios, que ya saben que hacernos goles es complicado. La confianza que adquirimos, y las dudas que generamos en el rival, acrecientan nuestras opciones".

Marcelino reconoció tras el partido ante el Valencia que al Sevilla aún le queda coordinar mejor las transiciones al área contraria. Kanoute asiente: "Es normal que nos falte automatizar los movimientos en ataque. Desde mi punto de vista, los automatismos de la parte ofensiva son más complicados. El entrenador tiene una idea y decide que se juegue de una forma, y quiere que a tal jugador le lances en largo, pero yo como jugador sé que no vamos a aprovechar esa opción, porque ese jugador la prefiere recibir corta y al pie, y es más eficiente recibiéndola así... Los jugadores tenemos que ir conociéndonos siempre dentro de las pautas que propone el entrenador. Ante el Valencia hubo un par de pases que yo fallo, y Álvaro también, en los últimos 30 ó 40 metros. Si afinamos en esos pases, ganaremos más".