El consorcio europeo Airbus es optimista por la marcha de las negociaciones con los Estados clientes del A400M, el avión militar que se ensambla en Sevilla, según aseguró ayer el presidente de Military Aircraft y Airbus España, Fernando Alonso, quien confía en que "lleguen a buen puerto".

Alonso se refirió así durante su intervención en el Airbus Media Day, celebrado en Toulouse (Francia), a las negociaciones que mantiene para que los países dejen de penalizar a la compañía por los retrasos en la entrega del avión.

Señaló que no puede adelantar aún una fecha para la finalización de las conversaciones, pero dijo que el diálogo "avanza y es constructivo" tanto con la Organización Conjunta de Cooperación en Armamento (Occar) como con cada Estado de forma individual.

A la vez que está inmerso en estas negociaciones, Airbus está desarrollando las capacidades que se incluyen en el contrato del A400M, como el abastecimiento de combustible en vuelo a otros aviones y helicópteros de la compañía.

El fabricante calcula que, a los costes de 24.000 millones de euros del programa, se sumarán 7.000 millones en sobrecostes. A día de hoy, el consorcio europeo ha entregado 45 aeronaves. España tiene una, aunque espera en próximas fechas recibir la segunda de las 27 encargadas. Según la previsión, 14 de ellas las operará el Ejército del Aire mientras que intentará vender las 13 restantes a otros países.

En cuanto al C295, Alonso destacó su "gran reputación" por su fiabilidad y eficiencia de costes y señaló que se están añadiendo nuevas funciones, como las pensadas para combatir a submarinos.

La presentación de la división de drones corrió a cargo de Jana Rosenmann, directora del área. Con sede en Atlanta (EEUU), buscca ofrecer nuevos modelos de negocio para sectores como el e-commerce o la toma de imágenes escalables para empresas de seguros.