El escultor palaciego Juan Manuel Martín García ya ha tomado una decisión: Nuestra Señora del Confinamiento viajará a Jerez de la Frontera. Dicha imagen fue realizada en su taller de Los Palacios y Villafranca durante los meses de confinamiento, en plena pandemia, de ahí su nombre. El artista compartió el proceso creativo a través de sus redes sociales, en directo. Pronto empezarían a llegarle propuestas de todas partes del mundo, para hacerse con la dolorosa.

Tras ser bendecida en la Iglesia de los Terceros de Sevilla, donde permaneció dos semanas en veneración, fue trasladada a Jerez para ser expuesta en el Santuario de María Auxiliadora, gracias a la mediación de la Hermandad de la Redención de la ciudad gaditana. Pese a haber visitado otros templos, este será finalmente el lugar elegido para que la imagen reciba la veneración de sus fieles y devotos.

"De 539 peticiones he mantenido el contacto o reuniones con 416", expone Juan Manuel. Uno de los motivos que le ha llevado a elegir el destino de su dolorosa ha sido la accesibilidad del lugar desde cualquier lugar del mundo. "Hay seguidores de Perú, El Salvador, Filipinas, Nicaragua, Veracruz de México... que me han preguntado dónde iba a estar la Virgen, para organizar sus vacaciones y venir a verla".

Juan Manuel Martín García en uno de sus directos en redes sociales

"La Virgen abandonará mi taller el 18 de noviembre y será entronizada en su nuevo lugar de culto el 20 de noviembre", justo veinte meses después del comienzo de su hechura. Llegará vestida de hebrea, "la ropa que tantos seguidores le han donado, y lógicamente allí la vestirán de reina". La Virgen será portada en andas desde las dependencias del colegio salesiano hasta el interior del templo, donde presidirá una misa a las 12:00.

Se trata de una imagen llena de simbolismo. Sus tres lágrimas reflejan los tres meses de confinamiento, el moño de la Virgen recrea la madeja del escudo de Sevilla, y el color púrpura que cubre su cuerpo recuerda a los fallecidos por la Covid-19. Los ojos son claros, como los de su difunta madre. Como curiosidad, María Santísima del Confinamiento figura en el Archivo de Patrimonio Histórico de Andalucía, por mediación de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía.