Málaga proyecta cien atraques de 'megayates' para potenciar su puerto

Si hay una estampa con la que se ejemplifica el lujo en la provincia de Málaga esa es la de los megayates atracados en Puerto Banús, a escasos metros de un espacio comercial de alta calidad donde se localizan algunos de los establecimientos comerciales más señeros. Copiar esta imagen, salvando las distancias obvias del grupo potencial de clientes, es el objetivo que se ha marcado el puerto de la capital de la Costa del Sol, que trabaja en estos momentos en impulsar una iniciativa que permita crear un centenar de puntos de atraque en el muelle 1, fortaleciendo el atractivo que actualmente presenta el centro comercial Muelle Uno.

Si bien hace algunos meses se puso sobre la mesa esta opción, no es hasta ahora cuando los responsables de la Autoridad Portuaria se han puesto manos a la obra y diseñan el pliego de condiciones que habrá de regir el concurso mediante el que formular la concesión de este espacio portuario. A la espera de conocer todos los detalles del mismo, las fuentes consultadas por este periódico sí indicaron que la intención es que este procedimiento vea la luz a finales del mes de abril, una vez cuente con el aval del Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria.

"El objetivo es que se ubiquen embarcaciones grandes, de alto standing a ser posible", expuso esta fuente, que apuntó que entre las exigencias que se reclamarán a las empresas interesadas en el concurso se incluirá una mejor puntuación para aquellas que incrementen los amarres disponibles para embarcaciones de más de 25 metros de eslora. "Habrá un mínimo exigible, pero aquellas firmas que aumenten esa cifra serán mejor valoradas", añadió. Y, en la misma medida, se tendrá en cuenta en el juicio final si las embarcaciones que se promueven son veleros.

Pero, ¿por qué el Puerto da este paso adelante en un momento en que el sector de puertos deportivos está de capa caída? Lo hace, aseguran las fuentes, no tanto con un objetivo económico, "porque no es algo que nos saque de pobres", sino con la idea de "jugar en favor de Muelle Uno y de la propia ciudad". "El éxito de Puerto Banús es que tiene embarcaciones que uno no puede ver en otros puntos de España", añadieron.

Un argumento nada baladí si se tiene en cuenta la situación en la que está inmerso este proyecto comercial, que, de momento, no parece alcanzar las expectativas que se pusieron en el mismo cuando se promovió. Una muestra de ello es, por ejemplo, que la promotora del espacio, Iniciativas Marina de la Farola, sigue renegociando con los responsables portuarios el canon anual al que está obligada por contrato. A la espera de que se cierren los detalles, algo previsible dada la disposición del Puerto, ya se sabe que el débito en este concepto acumulado se estima en algo más de 1 millón de euros. De acuerdo con las fuentes, cualquier acuerdo al respecto pasa necesariamente porque el socio privado retire la reclamación de casi 6 millones de euros que presentó años atrás contra el rechazo del Puerto al supermercado proyectado en la esquina de oro.

En esta iniciativa hay una cuestión que va en favor de los planteamientos del Puerto: el escaso desembolso económico que requiere esta actuación. Así al menos lo apuntaron las fuentes consultadas. "La inversión sería poca, porque podría tratarse de instalaciones flotantes, aunque habría que añadir alguna instalación en tierra", precisaron. Lo que no está aún cerrado es el canon que se reclamará por la concesión de estos atraques, dado que en este momento se está recalculando el valor el muelle.

El calendario que tiene previsto cumplir el Puerto, una vez pase el asunto por su consejo de administración, apunta a un plazo para la presentación de ofertas que culminaría el próximo mes de septiembre, con lo que sería factible pensar en que a finales de 2013 o principios de 2014 la ampliación de los amarres en el muelle de la Farola podría ser una realidad.