Grupo B

Argentina: La leyenda de los goles

LA selección argentina llega al Mundial de Suráfrica 2010 con un potencial pocas veces visto: el jugador más desequilibrante del mundo, Lionel Messi, los mejores goleadores de las ligas internacionales, la conducción de una leyenda como Diego Maradona y el técnico campeón del mundo en México 86, Carlos Bilardo, como mánager.

Sin embargo, la agónica clasificación argentina para el Mundial demostró que todo esto no es sinónimo de éxito inmediato y el camino hacia su tercer campeonato es largo y necesita un conjunto consolidado. Por ello, toda la atención está puesta en la preparación final, en la que tanto Maradona como futbolistas y fans esperan que la selección albiceleste encuentre un estilo de juego que explote toda su capacidad.

No son pocos los desafíos a los que se enfrenta el técnico, entre ellos cómo llevar adelante un esquema efectivo sin desaprovechar a los cinco delanteros estrella con que cuenta Argentina: Messi, Higuaín, Tévez, Agüero y Diego Milito.

Messi e Higuaín, goleadores de la Liga española, seguramente serán la dupla ofensiva titular argentina. Pero si Maradona -y la expectante hinchada argentina- quiere que la Pulga brille como en el Barcelona, deberá pensar en cómo crearle un entorno que le permita desplegar su genialidad, una asignatura todavía pendiente.

Sin Riquelme, enemistado con el técnico, Argentina cuenta con dos conductores en el mediocampo: el veterano Verón y Mascherano, capitán y pieza indispensable en el once de Maradona. Jonás Gutiérrez y Di María aportan además velocidad y reacción para crear jugadas de riesgo.

La defensa tiene sus pilares en Demichelis, Heinze y Samuel, a los que se pueden sumar Otamendi, Burdisso y Clemente Rodríguez, y la seguridad que demuestra en la portería Sergio Romero, cuyo suplente sería Mariano Andújar.

Maradona ya tiene en mente su equipo, pese al desfile de más de cien jugadores convocados desde su llegada a la selección en noviembre de 2008 que desdibujó la fase preparatoria y le quitó horas de juego al plantel estable.

Como pocas otras selecciones, Brasil quizás una de ellas, Argentina dispone de una enorme variedad de jugadores de calidad disponibles que representan una capacidad de variantes que envidiarían muchas potencias futbolísticas.

Ahora, el debate sobre cuál será el perfil final de la albiceleste, cuál será su estrategia de juego, si ofensiva o conservadora, quedará abierto hasta el debut de Argentina ante Nigeria el próximo 12 de junio.

El equipo africano es considerado el rival más difícil del Grupo B y Maradona podría afrontarlo con un esquema 4-1-3-2, mientras que podría cambiar a un 4-3-3 para incrementar su efectividad ofensiva ante Corea del Sur y Grecia, aunque esto implique cierta audacia de parte de un entrenador que no duda en recurrir al contraataque.

Maradona es de por sí un personaje controvertido. Elevado a la categoría de icono popular y mito viviente en su país, el ex jugador ya vivió al frente de la selección, al igual que en su vida personal, éxitos y derrotas de peso. Pero no se rinde y su sola presencia junto a la selección argentina en un nuevo Mundial ya estremece hasta a sus detractores.

Pese a que ya pasaron 24 años de la Copa del Mundo que Argentina ganó de la mano de Maradona en México, el recuerdo está fresco y la ilusión, intacta. Y todo esto combinado con la promesa de que este puede ser el Mundial de Messi, que llegará con 23 años recién cumplidos, y en su mejor momento, hacen de Suráfrica una promesa de fuertes emociones para los argentinos.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios