El Martes Santo, con 9.910, es la cuarta jornada con mayor número de participantes tras el Domingo de Ramos, la Madrugada y el Lunes Santo, aunque a sólo nueve personas de diferencia de esta última. La cofradía más numerosa del día es San Benito, cuyo cortejo lo integran 1.848 personas, de los que 1.438 son nazarenos y penitentes. Seis de las ocho cofradías superan el millar de integrantes. La más pequeña, con apenas 550, es los Javieres. La hermandad más rápida en pasar es la Bofetá, mientras que la más lenta es Santa Cruz. Éstas son algunas de las conclusiones que se desprenden del dossier del Martes Santo elaborado por Seprur para el Consejo de Cofradías. El Martes Santo es uno de los días más complejos de la Semana Santa y desde hace bastantes años está buscándose una solución a los problemas horarios que presenta. El documento supone una buena herramienta de trabajo sobre la que plantear futuras soluciones.

Una de las evidencias que se extraen tras analizar el informe es que las ocho hermandades realizan un importante esfuerzo para que los horarios por la carrera oficial se cumplan. De las más de 9.900 personas que participaron en la jornada, 6.900 (69,6%9 fueron nazarenos; 725 (7,3%) penitentes; 1.396 (14,1%), músicos; mientras que en otras categorías se encuadran 889 personas (9%). El día destaca por su elevado número de músicos, sólo es superado por el Domingo de Ramos y el Miércoles Santo, por la gran cantidad de monaguillos, casi 350, y por los hermanos que salen portando cruces.

La corporación más numerosa es la de San Benito (1.848), seguida por los Estudiantes (1.664) y el Cerro (1.655). Juntas acaparan el 52% del total del día. Si sólo se tiene en cuenta el número de nazarenos de cada corporación, sin penitentes, destacan San Benito, con 1.353 y el Cerro con 1.279, el 38% del total. En el lado opuesto se sitúan los Javieres con 292 y Santa Cruz con 445. Sumando también los penitentes, la más numerosa seguiría siendo San Benito con 1.438, pero seguida muy de cerca por los Estudiantes que sumaría 1.400. El Cerro procesionó con 1.322. El resto de las cofradías se quedan por debajo de mil.

En cuanto a los tiempos de paso, las hermandades requirieron poco más de seis horas y media para transitar por la Campana. Las tres de mayor tamaño emplearon más de una hora: San Benito (75 minutos), los Estudiantes (68 minutos) y el Cerro (63 minutos. En el lado opuesto se situaron los Javieres, que sólo consumió 22 minutos y Santa Cruz y la Bofetá con poco más de 36. El caso de la Bofetá es significativo porque su cortejo, compuesto por 1.069 personas, prácticamente duplica a las otras dos. No en vano, la corporación de San Lorenzo fue la más rápida de toda la jornada. En el conjunto de las hermandades pasaron de media una persona cada 2,4 segundos y cada minuto transitaron por el punto de control 17,3 nazarenos.

Es la tercera hermandad del día en volumen. Sus 1.279 nazarenos y 43 penitentes suponen el 80% de su cortejo, el segundo porcentaje por este concepto de toda la jornada. Al ser la cofradía que abre el Martes Santo, por la carrera oficial transitó con tres bandas de música, la de la cruz de guía y las dos de los pasos, que sumaron 240 personas, el 14,5% de su cortejo. La banda de cornetas y tambores que acompañó al primero de sus pasos, la del Sol, fue la más numerosa del día con 164 componentes y significó el 19% de esa primera parte de la hermandad.

Su ritmo de paso fue superior al de la media, especialmente en el paso de nazarenos: 20,4 por minutos, un 17,9% superior. La velocidad global fue de 26,4 integrantes por minuto. Todos sus nazarenos discurrieron en parejas salvos los penitentes que fueron de a tres.

Es la cofradía de menor tamaño. Suma 337 nazarenos incluidos los penitentes, una cantidad que supone el 61,5% del total de participantes, el porcentaje más bajo de la jornada. Destaca el nutrido grupo de monaguillos que la acompaña, alrededor de 50. Por este motivo, el grupo de otras personas supone el 21,7% de la cofradía. La velocidad de paso de sus nazarenos por la Campana fue la segunda más baja: 13,2 por minuto, un 23,7% más lenta que la media. Estas cifras se equilibran con el resto de las hermandades si se computa todo el cortejo. Empleo un total de 22 minutos en pasar, siendo más rápido el cortejo del Crucificado. Todos sus nazarenos, salvo los penitentes, formaron en parejas. La banda de música del paso de palio sumó 92 integrantes a su cortejo, el 16,8%.

Es una hermandad de tamaño medio dentro del conjunto del día. Sumó 903 nazarenos a los que hay que añadir 45 penitentes: el 77% de la cofradía. El total de personas que puso en la Campana fue de 1.232, lo que la sitúa en cuarto lugar. Es una de las más rápidas. Transita una persona cada 2,2 segundos, un 9,9% más que la media. El cortejo del Señor, más numeroso, fue más rápido que el del palio. En total, empleó 45 minutos en pasar. Sólo 3 de sus tramos con cirio formaron de a tres.

Es otra de las hermandades de más peso de esta jornada. Cuenta con 1.400 nazarenos, de los que 354 son penitentes, casi la mitad los que procesionan en todo el día y el segundo grupo más numeroso de toda la Semana Santa, sólo superado por Pasión el Jueves Santo. Los nazarenos con cirio y cruz suponen el 84,2% de la cofradía, cantidad más alta del día. Destacan en la cofradía universitaria sus 138 monaguillos, siendo su grupo de otras personas el mayor del día con el 21,3%. Tiene un ritmo global de 24,6 personas por minuto, unas décimas menos que la media. Si se centra el dato sólo en nazarenos y penitentes discurre algo más veloz. Todos sus nazarenos fueron en parejas, salvo los seis con penitentes.

Es la cofradía más concurrida del Martes Santo. El 77,8%, 1.438, fueron nazarenos, incluidos los penitentes. Otras 268 personas se integran en las tres bandas que acompañan a sus pasos, siendo el porcentaje de sus músicos el 19,2% de los de toda la jornada. Hay que recordar que dos pertenecen a la hermandad. Su velocidad de paso se igualó a la media del día: 24,8 personas por minuto. Se observa un paso algo superior a la media en los nazarenos. Empleó una hora y catorce minutos en pasar. Sus tramos fueron de a tres y los penitentes de cuatro en cuatro.

Puso en la calle a 1.212 personas. Sus nazarenos y penitentes, 919, sumaron el 75,8% del cortejo. También sumó otros 230 músicos. Su velocidad de paso fue algo inferior a le media. El tiempo de paso fue 52 minutos, con una velocidad de 23 personas por minuto. Cuatro tramos de ambos cortejos fueron de a tres.

Su cortejo lo integraron 1069 personas, de los que 739 fueron nazarenos (incluidos penitentes), un 69,1% del total. Sus dos bandas sumaron 231 componentes, un 21,6% del total de integrantes. Del resto, destacan los caso 60 monaguillos y acólitos. Fue la hermandad más veloz (18,5% más), con 29,5 personas por minuto. Los nazarenos en solitario también estuvieron por encima de la media. Empleó 36 minutos en discurrir y destaca la velocidad del cortejo de la Virgen: 40,2 personas por minuto, un 61% más rápido que la media. Tres de los cinco tramos del paso de Cristo y cinco de los seis del palio formaron de a tres.

Es la segunda cofradía de menor tamaño de toda la jornada. Procesionaron 522 nazarenos, incluidos los penitentes. Los penitentes solos, un total de 77, supusieron el 11,3% de la cofradía, porcentaje más amplio para este grupo de toda la jornada. También hay que sumar unos 50 monaguillos. La decana del Martes Santo es la cofradía con menor ritmo del día. Sólo transitan 14,3 nazarenos y penitentes por minuto (25,5% menos que la media) y si se tienen en cuenta todas las personas del cortejo serían 18,7 al minuto (24,9% menos que la media). En total, tardó 36 minutos en pasar por el punto de control de la Campana.