Desde el pasado día 11 de julio no es posible abonar cantidades elevadas en efectivo entre profesionales y particulares. La Organización de Consumidores y Usuarios, OCU, ha advertido de que actualmente este límite se encuentra establecido en un máximo de 1.000 euros para los pagos en efectivo.

Ya en el año 2012 este límite se encontraba establecido para pagos en metálico de un máximo de 2.500 euros, siendo la única excepción para ello a los pagos realizados en entidades financieras. No obstante, desde este 11 de julio de 2021 el límite vuelve a reducirse quedando establecido en 1.000 euros.

Nueva Ley contra el fraude

La medida se aprobó a finales del mes de junio y se encuentra dentro de la nueva Ley contra el Fraude, la cual contempla también la regulación de las criptomonedas y el ya citado límite de 1.000 euros, para operaciones entre particulares o profesionales. 

Esta es una de las medidas que el Gobierno de España ha puesto en marcha para lograr la desaparición del pago en metálico. Para todos aquellos consumidores o profesionales que necesiten abonar cantidades superiores a los 1.000 euros de límite, deberán optar por el pago con tarjeta o mediante transferencias bancarias.

#DINERO Se acabó el pagar elevadas cantidades en efectivo por un servicio o un producto: desde el 11 de julio el límite aplicable a las transacciones entre consumidores y profesionales es de 1000 euros. https://t.co/CqsrFoXoUX pic.twitter.com/MxR0UiP2oP

— OCU (@consumidores) August 7, 2021

La OCU recuerda que si la factura que debe pagarse representa más de los 1.000 euros de límite está no podrá abonarse en efectivo. Se puede optar por la fraccionación del pago o por los ya citados métodos bancarios. Además,el límite será aplicable incluso aunque los pagos correspondan a operaciones anteriores a la entrada en vigor de dicha ley, con fecha del 11 de julio de 2021.

Toda persona o profesional que exceda este límite podrá ser sancionado con una multa de hasta el 25 % del importe que se hubiera abonado en efectivo. Además, la sanción tiene un carácter solidario, esto es, la responsabilidad recaerá tanto en el receptor del importe como en el emisor; por lo que Hacienda podrá sancionar tanto a uno como a otro.

El organismo estatal también establece que podrá quedar libre de responsabilidad el denunciante que informe del incumplimiento de esta ley, siempre que se encuentre dentro de los tres meses posteriores al pago.

Esta medida viene dada principalmente para evitar fraudes generados por no pagar el IVA, dado que se paga en efectivo y sin factura. Por ello, OCU recomienda pedir siempre la factura, sea cual sea el modo de pago empleado y no pagar nunca en efectivo si el importe excede los 1.000 euros.